Descubren que la apnea del…

La ‘apnea obstructiva del sueño’ puede aumentar significativamente el riesgo de muerte súbita cardí­aca, una condición a menudo fatal en la que el corazón deja de latir y cuya situación debe ser tratada inmediatamente con reanimación cardiopulmonar (CPR, en sus siglas en inglés) o un desfibrilador externo automático, según un estudio publicado en la edición digital de ‘Journal of the American College of Cardiology’.

Precisamente, la apnea del sueño se diagnostica cuando una persona deja de respirar durante diez segundos o más, por lo menos cinco veces por hora durante el sueño, y sus sí­ntomas pueden incluir ronquidos fuertes, asfixia o jadeo durante el sueño y somnolencia por la mañana. Según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre, más de 12 millones de adultos estadounidenses sufren de apnea obstructiva del sueño y muchos de ellos están sin diagnosticar. “La prevalencia de la apnea obstructiva del sueño en la población occidental es alta y es probable que siga creciendo debido a la epidemia de la obesidad y la relación directa entre la obesidad y la apnea del sueño”, afirmó Apoor Gami, autor principal del estudio y cardiólogo del ‘Midwest Heart Specialists-Advocate Medical Group’, en Elmhust, Illinois (Estados Unidos).

Asimismo, la apnea del sueño puede conducir a una serie de enfermedades del corazón, incluyendo la presión arterial, la fibrilación auricular y los ataques al corazón. Los cientí­ficos de este estudio examinaron la relación entre la apnea del sueño y la muerte súbita cardiaca, ya que un estudio suyo anterior encontró que las personas con apnea del sueño más frecuente murieron súbitamente por causas cardí­acas durante las diez de la noche y las seis de la mañana, que es el tiempo menos probable para la muerte súbita cardí­aca en la población en general.

Los 10.701 pacientes que participaron en el estudio fueron seguidos durante un promedio de 5,3 años para los casos de muerte súbita resucitada o fatal. En ese tiempo, 142 pacientes sufrieron muerte cardí­aca súbita, tratándose principalmente de pacientes de 60 años, con 20 episodios de apnea por hora y un nivel de saturación de oxí­geno baja por debajo del 78 por ciento.

Por último, el estudio aclara que el riesgo de muerte súbita cardí­aca en los pacientes que padecen apnea del sueño no se limita al pasar de las horas del dí­a a las horas de la noche, sino que su riesgo general de muerte súbita cardí­aca es mayor que las personas sin esta condición.