La actividad fí­sica diaria antes…

Un padre enseña a su hija cómo usar la bicicleta.

Los niños menores de 9 años que tienen una actividad fí­sica diaria, especialmente a partir de los 6 años, tienen menos riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, según los resultados de un estudio internacional que ha sido dirigida por el investigador español David Jiménez-Pavón, de la Universidad de Zaragoza.

Precisamente, en concreto, el trabajo que publica la revista ‘BMC Medicine’ ha demostrado que los factores de riesgo para el desarrollo de una enfermedad cardiovascular son entre 2,5 y 5 veces mayores en los varones y hasta 7 veces en las niñas con menores niveles de actividad. El objetivo era evaluar la asociación entre la actividad fí­sica medida de forma objetiva y los factores de riesgo cardiovascular como tensión arterial sistólica, triglicéridos totales, la ratio colesterol total/colesterol HDL, resistencia a la insulina, grasa corporal y capacidad aeróbica. Para ello, analizaron los datos relativos a 3.120 menores (1.016 de 2 a 6 años, y 2.104 de 6 a 9 años) que a su vez forman parte del estudio longitudinal europeo ‘IDEFICS’ sobre obesidad y nutrición, en el que se incluyeron a 16.224 niños de entre 2 y 9 años de edad, y cuyas primeras conclusiones fueron presentadas en 2010 en Zaragoza.

Asimismo, los resultados del actual trabajo demuestran que en niños menores de 6 años la probabilidad de tener elevado el conjunto de factores de riesgo cardiovascular en aquellos que se encontraban en el nivel más bajo de actividad fí­sica fue 2,5 mayor que en los niños más activos. Esta misma probabilidad para la franja entre 6 y 9 años oscilaba entre 2,5 y 5 veces más para los niños y hasta 7 veces mayor riesgo para las niñas menos activas.

Ante estos datos, los autores del estudio insisten en que los profesionales sanitarios deberí­an recomendar entre 60 y 85 minutos al dí­a de actividad fí­sica entre moderada y vigorosa, incluyendo en este tiempo al menos 20 minutos de ejercicio vigoroso. Los datos de este estudio longitudinal permitirán seguir obteniendo más información sobre los hábitos y la salud infantil en general, al igual que gracias al estudio ‘IDEFICS’ ha sido posible demostrar que dormir menos de nueve horas diarias aumenta el riesgo de sobrepeso y obesidad infantil, que las tasas de obesidad infantil en el sur de Europa, especialmente en el arco mediterráneo, superan a las del norte y que el abandono de la dieta mediterránea, junto a un mayor sendentarismo, han originado una mayor prevalencia de esta epidemia en Italia, España y Chipre, frente a paí­ses como Bélgica y Suecia. También ha sido posible evidenciar que a los niños pequeños españoles les gusta la comida sabrosa y son, entre los europeos, los que en mayor grado se decantan por alimentos con más sal, azúcar y grasa.