El Congreso acepta ampliar los…

En la imagen, una joven usuaria de silla de ruedas en su puesto de trabajo.

El lí­mite de edad para poder acogerse al marco de incentivos para favorecer la contratación de jóvenes en situación de desempleo pasará de los 30, que es el tope superior general, a los 35 años, en el caso de los trabajadores con discapacidad.

Precisamente, así­ figura en una enmienda presentada por el Grupo Parlamentario Popular al proyecto de ley de medidas de apoyo al emprendedor y de estí­mulo del crecimiento y de la creación de empleo, que se tramita en estos momentos en el Congreso de los Diputados. La propuesta la planteó el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) al Gobierno, a través del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, y la aceptó, según esta plataforma, “la mayorí­a parlamentaria”. Tal y como consta en el texto de esta enmienda, los contratos a jóvenes de hasta 35 años que tengan una discapacidad igual o superior al 33% y que cumplan el resto de requisitos podrán beneficiarse de los incentivos previstos para la contratación a tiempo parcial con vinculación formativa, los contratos indefinidos por microempresas y empresarios autónomos y el contrato Primer Empleo Joven.

Igualmente, el contrato en prácticas, los contratos de incorporación de jóvenes a entidades de la economí­a social y los nuevos proyectos de emprendimiento joven. Esta ampliación del lí­mite de edad en caso de jóvenes con discapacidad supone, para el Cermi, “una medida de acción positiva” y obedece al hecho de que las personas con discapacidad se incorporan más tarde al mercado de trabajo que el resto, por la exclusión educativa y social que arrastran.