El 95% de los europeos…

La contaminación del aire es actualmente el mayor riesgo para la salud humana en Europa, puesto que más del 95% de la población urbana de la UE está expuesta a niveles por encima de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Ésta es una de las conclusiones recogidas en el capí­tulo relativo a Europa del informe ”˜Panorama Medioambiental Global (GEO-6): Evaluaciones Regionales”™, elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma) y la Comisión Económica para Europa de las Naciones Unidas, hecho público este miércoles. El informe indica que la mala calidad del aire, el cambio climático, los estilos de vida poco saludables y la falta de conexión entre las personas y el medio ambiente están afectando cada vez más a la salud humana en Europa. Además, destaca que en 2012 se produjeron más de 500.000 muertes prematuras atribuidas a la mala calidad del aire exterior y 100.000 a la contaminación interior. El estudio subraya que el cambio climático es una de las mayores amenazas para la salud humana y de los ecosistemas, así­ como para lograr el desarrollo sostenible en Europa, con efectos a través de inundaciones, olas de calor, sequí­as y una reducción de la productividad agrí­cola, que se agravan con la contaminación del aire, las alergias y enfermedades transmitidas por el agua y los alimentos. Por otro lado, el estudio indica que la pérdida de biodiversidad y la degradación de los ecosistemas continúan en Europa debido principalmente al aumento en el cambio de uso de la tierra, en particular por la intensificación agrí­cola, la urbanización y la fragmentación del hábitat. Esta situación ocurre de forma más acelerada en Europa occidental y oriental, y con menor incidencia en el centro del continente, Rusia y los paí­ses de Asia central. Además, los intereses en los recursos terrestres se han generalizado en toda la región paneuropea, ya que los paí­ses de la UE pierden cada dí­a 275 hectáreas de tierra agrí­cola para impermeabilización y ocupación del suelo. Los impactos de la calidad de la tierra para la salud humana se reflejan de diversas maneras, con beneficios directos en la alimentación y el ejercicio fí­sico para llevar un estilo de vida óptimo. El informe de la ONU apunta que los desafí­os ambientales en Europa se han vuelto “más sistemáticos y complejos”. “La transición hacia una economí­a verde inclusiva en la región debe construirse sobre los ecosistemas resilientes y la gestión racional de los productos quí­micos y los sistemas de producción limpia, y sobre las opciones de consumo saludable”, dijo Jan Dusik, jefe de la oficina del Pnuma en Europa.