Denuncian que un 22% de…

La crisis ha repercutido muy negativamente, en general, en la capacidad adquisitiva de los ciudadanos; pero cuando este hecho llega al ámbito de la salud sin duda hay que preocuparse por ello. Y es que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha detectado que hasta un 22 por ciento de ciudadanos ha dejado de comprar algún medicamento porque no podí­a pagarlo.

Es uno de los resultados de un estudio que ha elaborado la entidad para conocer la experiencia real de los usuarios en las farmacias, saber cuánto y para qué visitan una, si han detectado carencias en su funcionamiento y qué tipo de servicios les gustarí­a que ofrecieran. Los resultados indican que, en general, las boticas ofrecen un servicio bien considerado. De hecho, un 70 por ciento va siempre a la misma, un 28 por ciento va a una o dos, y solo el dos por ciento cambia de farmacia cada vez que necesita estos servicios.

 

Para los encuestados por OCU, la cercaní­a al domicilio es la principal razón para elegir una botica (82 por ciento), mientras que conocer al personal (42 por ciento), la amabilidad y simpatí­a de quien atiende (34 por ciento) y el conocimiento del historial médico particular (20 por ciento) son otros motivos. Además, los aspectos que más valoran los ciudadanos de la prestación que se les dispensa son el trato adecuado y la simpatí­a (92 por ciento), la utilización de un lenguaje claro y comprensible (91 por ciento), los conocimientos del farmacéutico (90 por ciento) y la calidad de la información (84 por ciento). Por el contrario, lo que menos gusta son los precios de los productos que no son medicamentos (44 por ciento), la falta de información espontánea (22 por ciento), que no haya privacidad en la farmacia (22 por ciento) y los tiempos de espera (18 por ciento). Respecto a la falta de privacidad, un 64 por ciento de los ciudadanos agradecerí­a que en estos establecimientos existiera un espacio para poder hablar en privado sobre su salud.