Chamartí­n y Aragón triunfan en…

En la imagen, jugadores de deporte adaptado en silla de ruedas.En su vigesimocuarta edición, el Campeonato de España de Goalball, que se disputó en Cartagena el pasado fin de semana, vivió el regreso del equipo gran dominador de la categorí­a masculina, pues los madrileños de Chamartí­n dieron la campanada y derrotaron en la final al favorito Canarias Cludeón, con un gol de oro en la prórroga, que supuso el 6 a 5 final y, con ello, su octavo tí­tulo de Campeón de España.

Ambos equipos habí­an dominado en la liguilla, terminando primeros los canarios, que empezaron derrotando por 14 a 4 al debutante Cantabria y por 10 a 0 precisamente a Chamartí­n, en un partido completamente distinto al que se darí­a posteriormente. Ya con la clasificación resuelta, y dando minutos a los jugadores suplentes, cayeron ante Valencia por 10 a 13. Por su parte, los madrileños de Chamartí­n supieron asegurarse su presencia en la final merced a dos contundentes victorias ante Valencia por 16 a 6 y Cantabria por 10 a 0. En el partido que iba a decidir el tercer clasificado final, Cantabria le ganó a Valencia por 4 a 1, asegurándose el bronce en su primera aparición en la competición.

La final parecí­a decantada a priori a favor de Canarias, que contaba con el jugador más en forma actualmente, Jesús Santana, máximo goleador de la liga y de este campeonato con 27 tantos, pero se encontraron con un equipo que, liderado por José Daniel Fernández y el veterano José Fernando Garcí­a, supo poner la calma suficiente y esperar su oportunidad, que llegarí­a en la prórroga, tras un emocionante empate a cinco. En esa prórroga, donde el primer equipo que anote se lleva el triunfo, pudo más la veteraní­a de Daniel, que anotó a falta de 1:16 para llegar al final de la primera parte del tiempo extra. Fue el colofón a un fin de semana completo, en el que habí­a anotado 26 goles. En la categorí­a femenina, Aragón y Sevilla vení­an a intentar decidir quién es el mejor equipo en la actualidad, ya que terminaron la liga empatados a puntos, con tí­tulo para las mañas por un gol de diferencia.