Las universidades exigen al Gobierno…

En la imagen, una investigadora en un laboratorio.La Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) reclamó este viernes un “cambio radical” en la polí­tica de I+D del Gobierno, que garantice un aumento de la inversión “suficiente y sostenible” y acabe con los recortes en la contratación de recursos humanos.

Precisamente, la CRUE lamentó “el escaso incremento de 214 millones de euros en la partida de I+D+i que recoge el anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2014”.
“Nos decepciona constatar que este crecimiento no compensa ni siquiera la caí­da de 461 millones que sufrió el presupuesto de 2013 (frente al de 2012), y mucho menos la enorme reducción sufrida en los cuatro últimos años”, apuntó.

Según los rectores, “nuevamente se ha hecho oí­dos sordos a la reivindicación que realizan los diferentes colectivos representados en la plataforma ‘Carta Abierta por la Ciencia'”. Con todo, advirtieron de que “un adecuado nivel de inversión en I+D” solo tendrá sentido si va unido a una mayor financiación para los programas de recursos humanos. Hay que incorporar “un número suficiente de técnicos e investigadores predoctorales y posdoctorales”, prosiguen los rectores, pues “la enorme reducción de los fondos dedicados a estos programas en los últimos años ha dado lugar a una pérdida de capital humano que se refleja ya en la economí­a y productividad de nuestro paí­s”. Esta situación “se ve agravada por la exigua, injusta y a todas luces insuficiente tasa de reposición de efectivos que se aplica a las universidades españolas”, destacó la CRUE.
A su juicio, “poder contratar un solo investigador por cada diez que se jubilan es condenar a la I+D+i de España, a la competitividad de su sistema de innovación y a su tejido productivo a un desmantelamiento inexorable y a una ruina segura en pocos años”.

Por último, los rectores se felicitaron por la mejora en la financiación del Consejo Superior de Investigaciones Cientí­ficas (CSIC), aunque recordaron que el 60% de la producción cientí­fica española se lleva a cabo en las universidades. Estas tienen además que “soportar la subordinación de los gastos en I+D+i a los objetivos de déficit de la comunidad autónoma en que se ubican”, por lo que muchos proyectos valorados de forma positiva nunca llegan a desarrollarse. “La incomprensible falta de coordinación interministerial en los programas de recursos humanos; las ingentes trabas administrativas y burocráticas; los retrasos en la publicación de las distintas convocatorias tanto de financiación de proyectos como para la contratación de trabajadores, y los drásticos recortes agravan esta ineficiencia, que pone en peligro la continuidad de grupos de investigación de calidad ya consolidados”, concluyó la CRUE.