La Alianza Internacional de la…

Niña amputada agarrada a la pierna de una mujerLa presidenta de la Alianza Internacional de la Discapacidad (IDA, en sus siglas en inglés), Diane Richler, aseguró este miércoles en la inauguración de la Conferencia Internacional ‘Los Desafí­os del Nuevo Milenio para las Mujeres con Discapacidad’, organizada por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), que el desafí­o al que nos enfrentamos no sólo es el respeto a los derechos humanos de las personas con discapacidad, sino que, a veces, nos encontramos con que “no tienen un trato de seres humanos”.

Por ello, advirtió que es un “gran reto” para muchos paí­ses transformar esta realidad, ya que todaví­a hay muchas mujeres con discapacidad que sufren violencia, explotación y todo tipo de abusos. “Se trata de algo sorprendente para quienes abogamos por los derechos humanos”, agregó.

Por su parte, el presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), Luis Cayo Pérez Bueno, apostó por reflexionar y reiventar una agenda polí­tica de discapacidad y género. Para él, “si hay algo que justifica y está detrás del movimiento social, es la dificultad enorme para soportar las condiciones de vida, de ciudadaní­a, del entorno, que no hemos tenido la oportunidad de elegir”.

En este sentido, señaló que son estas situaciones las que impiden a las personas con discapacidad avanzar en una mayor participación y no tener visibilidad. “Somos activistas y, por tanto, actuamos, para transformar ese entorno ingrato, hostil, e indeseable que queremos cambiar”.

Para poder llevar a cabo ese cambio “necesario”, Pérez Bueno subrayó que el desarrollo en materia de género “es fundamental”, en relación a todo lo que afecta a las mujeres y niñas con discapacidad. Por ello, propuso “estimular la acción polí­tica”, al mismo tiempo que reconoció que “todaví­a queda mucha reflexión y pensamiento en materia de género”, por lo que, “son necesarias las personas expertas en este ámbito que participan en esta conferencia”.

El presidente del Cermi Estatal apostó por la lucha para que las mujeres y niñas con discapacidad “tengan su sitio” porque, “ellas lo han creado y son copartí­cipes y corresponsables de este movimiento social”. “Hay que crear una agenda polí­tica global más justa, amplia y enriquecida”.

Pérez Bueno concluyó diciendo que “tenemos una deuda histórica con las mujeres y las niñas con discapacidad”.
Por su parte, el presidente del Foro Europeo de la Discapacidad (EDF), Yannis Vardakastanis, destacó la “necesidad” de crear un futuro para el movimiento social de la discapacidad, sobre todo, para mujeres y niñas con discapacidad en Europa y en el resto del mundo.

La directora ejecutiva de la ONU Mujeres, Michelle Bachelet, que envió un videomensaje a la conferencia internacional ensalzó la labor del movimiento asociativo de la discapacidad, representado por el Cermi, por su lucha “sin descanso” por garantizar los derechos de las personas con discapacidad y su igualdad de oportunidades.

Asimismo, destacó la falta de participación efectiva por parte de las personas con discapacidad y apostó por mantener un compromiso con una “sociedad inclusiva e igualitaria”.

“La fuerza de las ideas mueve la esperanza para conseguir un mundo mejor y la lucha por esos ideales es la que promueve los cambios más importantes que modifican la mente de las personas, que aprenden a adquirir una comprensión distinta a los patrones heredados”, aseveró.

Por último, la vicepresidenta de la Comisión Europea y comisaria de Justicia, Derechos Fundamentales y Ciudadaní­a, Viviane Reding, también a través de una videoconferencia, pidió la participación activa de las mujeres con discapacidad, que sufren una doble discriminación.

Tras la inauguración se celebró la primera conferencia marco titulada ‘Una experiencia de vida desde la superación personal’ en la que Genet Corcuera, la primera española sordociega que ha llegado a la universidad, contó sus experiencias vitales, desde que abandonó Etiopí­a, lugar en el que nació, hasta que llégó a la universidad.

Corcuera destacó la incidencia de la ONCE en su vida, ya que aseguró que la organización ha sido fundamental en su aprendizaje para poder comunicarse y para cursar estudios universitarios.

Además, dijo que su vida no ha sido nunca fácil, “cuando las chicas de mi edad salí­an a divertirse a la calle yo estudiaba y estudiaba” y con total sinceridad reconoció que “mi futuro es incierto”, aunque agregó estar dispuesta a seguir luchando.