Hasta 120.000 muertes por shock…

Hasta 120.000 muertes por shock se podrí­an evitar en España si se mejoraran los sistemas de detección precoz, según ha afirmado la directora del Grupo Nacional de Shock de la Sociedad Española de Medicina de Emergencias (SEMES), Ana Naví­o.

Por este motivo, el equipo de Naví­o ha editado el libro ´Actualización del manejo del paciente en shock´, dirigido a médicos y enfermeros de Urgencias con el objetivo de que amplí­en sus conocimientos en el manejo y tratamiento de las personas que acuden a estos servicios en estado de shock.

 

Se trata de un sí­ndrome que se caracteriza por la incapacidad del corazón o de la circulación periférica de mantener la perfusión adecuada de órganos vitales, debido a diferentes causas como, por ejemplo, cardiovasculares o infecciosas. “El problema que tenemos para diagnosticar un shock, sea del tipo que sea, es que los pacientes suelen venir al hospital por su propio pie y diciendo que tienen malestar general desde hace un dí­a”, ha comentado Naví­o, para avisar de que aunque estos enfermos pueden hablar están sufriendo un fallo multiorgánico.

Como consecuencia de ello, el diagnóstico “suele llegar tarde”, lo que deriva a un tratamiento tardí­o y, por ende, a la muerte del paciente. En este sentido, la experta ha trasladado parte de la culpa de esta tardanza a la “falta de conocimiento cientí­fico” que hay sobre este sí­ndrome que, ha recordado, ocurre en “todos” los grupos de edad. El diagnóstico médico se realiza a través de la integración de datos surgidos del interrogatorio, enfermedad actual, grupo de riesgo y datos cuantitativos como signos vitales, laboratorio y biomarcadores de sufrimiento orgánico e hipoperfusión.