El ejercicio mejora la tolerancia…

Las mujeres con cáncer de mama que siguen un programa de ejercicio fí­sico durante el tratamiento de quimioterapia experimentan menos efectos secundarios como fatiga, disminución de la aptitud fí­sica, náuseas y dolor. Además, a menudo es menos necesario ajustar la dosis de quimioterapia, según lo demuestra un estudio dirigido por el profesor Neil Aaronson, del Instituto del Cáncer de Holanda (NKI, por sus siglas en inglés). La quimioterapia puede ser muy molesta para los pacientes y, debido a los efectos secundarios, no todos son capaces de completarla como estaba previsto originalmente, sino que requieren un ajuste de la dosis. Hay algunos indicios de que el ejercicio fí­sico puede ayudar a reducir estos efectos adversos.

Aaronson estaba interesado en determinar qué tipo de programas de ejercicio fí­sico son los más efectivos y si estos planes también puede ayudar a los pacientes a tolerar mejor la quimioterapia. Así­, investigó estos temas en un grupo de mujeres con cáncer de mama que recibieron quimioterapia adyuvante.