El 95% de los dolores…

En el 75 por ciento de los casos, la causa del dolor es el propio tumor, aunque también puede estar producido por los tratamientos implementados por el médico o determinados cuadros clí­nicos del paciente. La mejor estrategia contra el dolor oncológico es su prevención, que debe empezar en el mismo momento en que se detecta el tumor. Además, el oncólogo debe intentar evitar derivaciones innecesarias a las unidades de dolor, recuerdan los expertos.

Alrededor de 70 médicos especialistas en Oncologí­a Médica, Oncologí­a Radioterápica y Cuidados Paliativos se reunieron en la segunda edición del Curso Pain sobre Dolor Oncológico, que contó con el aval cientí­fico de la Sociedad Española del Dolor (SED), la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL), la Sociedad Española de Oncologí­a Médica (SEOM) y la Sociedad Española de Oncologí­a Radioterápica (SEOR).

El curso “constituye una exhaustiva actualización sobre el abordaje del dolor oncológico y permite compartir experiencias prácticas”, según el Dr. Luis Olay, oncólogo radioterápico del Hospital Universitario Central de Asturias. Este curso se englobó dentro de la campaña CHANGE PAIN, que tiene por objetivo concienciar sobre la importancia del adecuado abordaje del dolor.

En el 75 por ciento de los casos, la causa del dolor es el propio tumor, aunque también puede estar producido por los tratamientos implementados por el médico e incluso por determinados cuadros clí­nicos del paciente, manifestaron los especialistas. Al tratarse de dolores complejos, su abordaje debe ser multidisciplinar. “El propio oncólogo debe ser el principal responsable de esto, intentando evitar derivaciones innecesarias a las unidades del dolor” explicó el Dr. Olay.

“La mejor estrategia contra el dolor oncológico es su prevención, que debe empezar en el mismo momento en que se detecta el tumor”, recalcó el Dr. Olay. Así­, “es importante que el médico pregunte constantemente a su paciente por las caracterí­sticas y evolución de su dolor”. El experto cree que este tipo de cursos son muy necesarios, ya que “el dolor no sólo asusta a los pacientes, sino también a los médicos, y muy especialmente el dolor oncológico e intenso. Cualquier oncólogo con una formación adecuada podrí­a tratar el 95% de los dolores que tenga su paciente” dijo.

El dolor oncológico “es un sí­ntoma que afecta a un elevado porcentaje de pacientes con cáncer”, explicó el experto. Su intensidad va de moderada a intensa. Y añadió que “varí­a en función del tipo de tumor y del estadio del mismo”. Hay más dolor cuanto más avanzada se encuentra la enfermedad, recordó el Dr. Olay.

El especialista puso de manifiesto que en los últimos años se ha incrementado considerablemente el arsenal terapéutico de fármacos opioides. “Han aparecido nuevas moléculas y se han ido adaptando las presentaciones de las ya existentes a las necesidades de los pacientes” matizó. Por otro lado, “la radioterapia sigue siendo una buena opción terapéutica contra este sí­ntoma, ya que se ha mostrado muy eficaz en el control del dolor producido por metástasis vertebrales o por tumores localmente avanzados”, explicó el experto. En el cuarto y último escalón estarí­an los procedimientos más intervencionistas, que suelen llevarse a cabo en las unidades de dolor. “Pueden aliviar mucho el dolor en pacientes con tumores avanzados” concluyó.