¡El cole está a la vuelta de la esquina!

Hace unas semanas nos despedimos para descansar durante el verano, y hoy volvemos para tratar un tema muy importante en los próximos días: la vuelta al cole.

La vuelta al colegio es un momento cargado de emociones muy diversas. Cada niño y niña lo puede vivir de diferente manera, y es muy importante validar estas y mostrar comprensión hacia ellas.

Por ello, dedicamos la primera publicación del curso a hablar sobre esas posibles emociones que pueden experimentar los más pequeños, y recogemos una serie de estrategias y orientaciones para poner en marcha días previos a este momento y durante el mismo.

ENFRENTANDO EMOCIONES

La vuelta al colegio es un cambio, y un cambio siempre genera diversas sensaciones y emociones, algunas positivas y otras negativas. Pero lo más importante es ayudar a los más pequeños a poner nombre a qué y cómo se sienten.

Las emociones más comunes que experimentan los niños y niñas de manera previa al inicio de las clases y durante el primer y los primeros días son: el miedo, el nerviosismo, la ansiedad, el estrés, la ilusión, la alegría, la tristeza…

Estas emociones se derivan al enfrentarse a un nuevo entorno, y a las nuevas situaciones que esto puede llegar a suponer. Además, el cambiar las relajadas rutinas del verano a las nuevas demandas escolares también supone un proceso de adaptación.

En sentido:

ORIENTACIONES PARA LAS FAMILIAS

Lo más importante para ayudar a los niños y niñas a enfrentarse a los cambios es adelantar este momento. De esta manera, algunas estrategias que se pueden llevar a cabo en esos días previos son:

• Ir a comprar el material escolar y respetar sus elecciones dentro de aquello que sea necesario. Además, se puede disfrutar de un momento en familia preparándolo todo (forrando libros, poniéndole el nombre al material, preparando la mochila…) y dejándolo organizado para ese primer día.
• Marcar el inicio del colegio en el calendario e ir tachando los días para que sean más conscientes del espacio-tiempo, pero sin generar agobios o estrés.
• Lecturas acordes a la edad en relación a la temática de enfrentarse a cambios, de empezar una nueva etapa, del inicio de curso…
• Si no conoce el colegio, se puede ir a verlo desde fuera y dar un paseo por los alrededores para que se vaya familiarizando con la zona y el primer día pueda reconocer el entorno.
• Para enfrentarse al nuevo día se puede diseñar un horario con las rutinas previas a seguir: irse a dormir pronto el día anterior, dejar la ropa y la mochila preparada, levantarse con tiempo, hablar sobre cómo se siente esa mañana, ir explicando el recorrido y fijándose en aspectos relevantes durante el mismo, y cuando llegue el momento de la despedida hacerlo desde la tranquilidad.
• Para que se sientan más cómodos y seguros el primer día de colegio también les podemos dejar elegir por ellos mismos la ropa que quieran llevar.

Como padres y madres es normal que también experimentemos diversas emociones (preocupación, nervios, miedo, tristeza, estrés…), porque los cambios suponen que nuestros hijos e hijas están creciendo. Por lo que también es muy recomendable expresarles nuestras emociones, ya que así estaremos trabajando el hecho de que todas las emociones son válidas, pero debemos intentar crear un clima de tranquilidad y seguridad.

Y por último, no se debe hacer comparaciones con cómo se muestran otros niños y niñas ante esta situación, ya que cada uno experimenta sus propias emociones.

PROPUESTAS PARA LOS DOCENTES A DESARROLLAR EN EL PRIMER DÍA DE COLEGIO

El primer día también puede generar diversas emociones y sensaciones en los docentes. Como profesionales de la educación debemos preparar ese día y evitar la improvisación, porque es muy importante crear un buen ambiente desde el primer momento.

Por ello, para hacer más ameno este momento para todos y todas se pueden realizar diversas propuestas:

• Familiarizar al alumnado con el espacio del aula y contar con su apoyo para organizarla, decorarla… el aula se configura como la zona de referencia dentro del colegio y debe convertirse en un espacio seguro, así ellos se sentirán parte de ese espacio y cómodos desde el inicio.
• Presentar las principales normas del aula y establecer algunas otras entre todos. Crear de manera colaborativa un cartel en el que se recoja todas ellas para que se familiaricen con ellas desde el inicio y siempre estén a la vista.
• Entregarles un pequeño detalle, como una pequeña carta en la que les demos la bienvenido, les mostremos nuestras emociones y les ofrezcamos una lista de consejos para comenzar el nuevo curso.
• Crear espacios de escucha activa, dónde todos puedan participar contando cosas sobre sus vacaciones, pero sin obligar a nadie que no quiera participar. Además, para hacer más ameno y seguro este momento se pueden hacer juegos de presentación o utilizar materiales que han podido preparar durante el verano (como por ejemplo: una caja donde hayan guardado sus tesoros del verano) que les otorguen confianza y les ayuden a recordar y organizar el mismo.
• Mostrarse abiertos a nuevas propuestas que realizar durante el curso: temas sobre los que investigar, dinámicas a realizar (podcast, blog, debates…). Escuchar y tener en cuenta sus ideas es la mejor forma de innovar e involucrarles de manera activa en su proceso de aprendizaje para que este sea vuelva realmente significativo.
• Dejarles tiempo libre para que se relacionen entre sí y jueguen, ya que este es un muy buen momento para realizar una observación sistemática en un ambiente no dirigido y poder conocer mejor a nuestros alumnos y alumnas desde el principio y permitirles a ellos conocerse entre sí.

Y por supuesto, algo muy importante es que la familia y la escuela establezcan lazos de unión y colaboración desde el inicio, para hacerles el camino más fácil a los más pequeños.

Con la vuelta al cole retomamos nuestro trabajo, asi que no dudes en contactarnos para dar respuesta a tus dudas en educacion@famma.org , estaremos encantadas de atenderte.

¡FELIZ VUELTA AL COLE!