Resurge una tienda de disfraces…

Adecuar el puesto de trabajo a la discapacidad del trabajador. La empleabilidad como prioridad en la empresa. Esa es la filosofí­a de Nekane Jiménez, la pequeña empresaria que ha resucitado, después de 30 años de historia, la tienda Disfraces Romu.

Desde su propia experiencia personal como trabajadora con discapacidad Nekane busca crear puestos de trabajo para integrar a discapacitados: “Antes, cuando te diagnosticaban una incapacidad, te pensabas que ya no serví­as para nada; incluso hay gente que sigue opinando lo mismo, y se echan para atrás a la hora de darte trabajo”. Nekane empezó a trabajar en Julter Servicios en 2006 y, poco tiempo después, se convirtió en una de las socias. La empresa nació con el objetivo de ayudar a la gente a conciliar su vida laboral con las tareas del hogar.

Para ello ofrecen servicios de limpieza, planchado, pequeñas reparaciones de la casa e, incluso, te hacen la compra. Nekane recuerda: “Desde siempre fue una empresa muy sensibilizada para emplear a personas con alguna discapacidad y, con el paso del tiempo, hemos profundizado más en este aspecto”. La unión entre Julter Servicios y Disfraces Romu es la persona que ha confiado en los discapacitados para darles una salida Al margen de su vida laboral en Julter Servicios, Nekane es una apasionada del carnaval. Desde hace 12 años gestiona la comparsa de Presentación de Marí­a: “Cuando me enteré que Antonio, el anterior gerente de Disfraces Romu, se jubilaba y cerraba me dio muchí­sima pena. Yo siempre le compraba los complementos. Pensé cómo podí­a englobarlo dentro de la filosofí­a de Julter Servicios y crear otro puesto de trabajo”. De esta forma Disfraces Romu echó la persiana pero, pocos meses después, Nekane la volví­a a levantar junto a Yolanda. Ambas se complementan y minimizan sus carencias con predisposición y buen talante: “Estamos disfrutando como locas; nos montamos unas pelí­culas impresionantes. Es un negocio que da mucho juego”. Por ahora la nueva gerencia de Disfraces Romu ha conseguido 2 hitos: resucitar una de las pocas tiendas de disfraces de Vitoria y, además, hacerlo para dar trabajo a personas con distintas discapacidades.