La fisioterapia puede ayudar a…

Colegios profesionales de fisioterapeutas han anunciado que la fisioterapia puede ayudar a prevenir el linfedema, una consecuencia crónica del cáncer de mama. Según integrantes de Colegios Oficiales de fisioterapeutas de Madrid, Paí­s Vasco, Navarra y Cataluña, la fisioterapia puede prevenir la aparición del linfedema, ofrecer educación sanitaria al respecto, y en caso de aparición, mejorar la calidad de vida de las mujeres que la sufran.

El linfedema es un problema para las mujeres que padecen cáncer de mama a la hora de realizar determinadas actividades cotidianas en el trabajo y en sociedad. Además, el cáncer de mama es el tumor que más frecuentemente afecta a las mujeres de los paí­ses desarrollados. Las que padecen linfedema como consecuencia del cáncer de mama lo sufren debido a su tratamiento. Comienza como una inflamación en una extremidad como efecto de la acumulación de lí­quido intercelular entre la piel y los músculos.

Según la complicación de la intervención quirúrgica, puede variar la probabilidad de aparición hasta en un 10%. Además de aumentar el volumen del miembro afectado, el linfedema puede generar un edema, asimetrí­a fí­sica, pesadez, problemas motrices o dolor entre muchos otros problemas.

Por último, este colectivo de fisioterapeutas recomienda a las pacientes operadas de cáncer de mama que realicen un programa de ejercicios especí­ficos para prevenir el linfedema, mejorando la movilidad del brazo.