El consumo de antibióticos se puede reducir más de un 60% si se «empodera» al paciente
El consumo de antibióticos para tratar infecciones respiratorias se puede reducir más de un 60 por ciento si el profesional «empodera» al paciente a partir de la prescripción diferida, según un estudio publicado en la revista ‘Jama Internal Medicine’, en colaboración del Instituto Catalán de la Salud (ICS).
Se trata de un ensayo clínico multicéntrico realizado durante tres años en 23 centros de atención primaria (CAP) de Cataluña, Madrid, País Vasco y Navarra con una muestra de 400 pacientes, e impulsado por investigadores del grupo de Epidemiología Clínica y Servicios Sanitarios del instituto de Investigación Biomédica Sant Pau y de ambulatorios de Barcelona, Mataró, Badalona, Tarragona, Canet de Mar y Viladecans. Las infecciones respiratorias agudas son uno de los principales motivos de consulta en la Atención Primaria, y la mayoría de éstas se resuelven por sí mismas, si bien buena parte de los pacientes con esta infección reciben antibióticos actualmente. La prescripción diferida es una estrategia de promoción de un «uso más racional» de los antibióticos en este tipo de infecciones, consistente en instruir al paciente para que los tome solo si los síntomas no mejoran o empeoran días después de la visita.