Comer carnes rojas procesadas podrí­a…

Los hombres que comen cantidades moderadas de carne roja procesada pueden tener un mayor riesgo de incidencia de insuficiencia cardiaca y de mortalidad, según un estudio que se publica en ‘Circulation: Heart Failure’. Las carnes procesadas son conservadas mediante sistemas con humo, curado, salazón o adición de conservantes, como los embutidos (jamón, chorizo), las salchichas y el bacon.

‘La carne roja procesada contiene comúnmente sodio, nitratos, fosfatos y otros aditivos alimentarios, y las carnes ahumadas y asadas también poseen hidrocarburos aromáticos policí­clicos, que pueden contribuir a un mayor riesgo de insuficiencia cardiaca’, afirma Alicja Wolk, autora principal del estudio y profesora en la División de Epidemiologí­a Nutricional del Instituto de Medicina Ambiental del Instituto Karolinska en Estocolmo (Suecia). ‘La carne sin procesar está libre de aditivos alimentarios y, por lo general, tiene menor cantidad de sodio’, añade.

El estudio ‘Cohort of Swedish Men’, el primero en examinar los efectos de la carne roja procesada por separado de la carne roja no procesada, incluyó a 37.035 varones de entre 45 y 79 años de edad sin antecedentes de insuficiencia cardí­aca, cardiopatí­a isquémica o cáncer. Los participantes completaron una encuesta sobre el consumo de alimentos y otros factores sobre su estilo de vida y los investigadores les siguieron desde 1998 hasta el momento del diagnóstico la insuficiencia cardiaca, la muerte o el final del estudio en 2010.