Alertan de un aumento de…

En la imagen, un grupo de personas practica ejercicio fí­sico en un gimnasio.El doctor Aurelio Quesada, cardiólogo del Hospital Casa de Salud de Valencia, ha advertido recientemente del riesgo “cada vez mayor” de padecer arritmias o fibrilaciones auriculares ante la práctica de ejercicio fí­sico sin un control previo. Según ha destacado el especialista, “la fibrilación auricular o arritmia es la epidemia del siglo XXI y es cada vez más frecuente dado que “el cambio en el estilo de vida hace que se sufra más y se tolere peor”.

Quesada ha subrayado que ponerse a hacer deporte “sin ningún tipo de control no ayuda” ya que “hay muchas personas que no están preparadas y se produce una merma enorme en la calidad de vida”. Por ello, sostiene que deberí­a ser “obligatorio” realizarse un chequeo médico antes de empezar algún ejercicio.

El cardiólogo indica que el corazón “no es el único factor que influye en la fibrilación auricular pero sí­ que es uno de los más importantes” en franjas de edad como los 50 años. La arritmia es cualquier alteración del ritmo normal y ordenado del corazón y, aunque hay muchos tipos, la más frecuente es a partir de los 50 años, como fibrilación auricular “de unos 60 o 70 latidos por minuto, cada fibra de la aurí­cula pasa a activarse de forma desorganizada y muy rápida”. “Afortunadamente hacia el ventrí­culo no pasan todos los latidos pero como la contracción auricular es totalmente caótica, no produce el bombeo deseado”, ha explicado el especialista. Las claves para el control son la prevención, sobre todo de la hipertensión y el consultar con un especialista cómo tratarla al empezar a tener palpitaciones o detectar un pulso irregular.

Por último, el cardiólogo ha indicado que se puede tratar, pero ha recalcado que el tratamiento “pasa por la corrección de los factores desencadenantes, la elección del medicamento correcto y si esto aún no fuera eficaz, la fibrilación puede controlarse quemando la aurí­cula por un catéter”. “Cuanto más precoz sea el diagnóstico más sencillo y simple será ese tratamiento. Si no, se puede sufrir desde una embolia hasta llegar a comprometer la vida, por no detectarse a tiempo”, ha advertido el doctor Quesada.