El Congreso de los Diputados rechaza garantizar por ley la dignidad al final de la vida
El pleno del Congreso de los Diputados rechazó este martes con 123 votos a favor, 171 en contra y 18 abstenciones la toma en consideración de una proposición de ley defendida por el PSOE para garantizar por ley en toda España la dignidad de los enfermos terminales al final de su vida. El PP se opuso con el argumento de que eso ya “se está haciendo”.
José Martínez Olmos defendió en la tribuna la proposición de ley que el PSOE sometía a la toma en consideración para garantizar en toda España el derecho de los pacientes que sufren una enfermedad terminal a mantener su dignidad, a no sufrir dolor y a preservar su intimidad. No es una estrategia de cuidados paliativos, precisó, sino un avance de los derechos de los ciudadanos con el que la mayoría de la sociedad y de las profesiones sanitarias están de acuerdo.
Alertó de que existe una “enorme desigualdad” en cuanto a la garantía de esos derechos según la comunidad autónoma del paciente, y de que la Iglesia no puede seguir influyendo en la toma de decisiones que solo competen a cada persona y su familia. No es un debate sobre la eutanasia, añadió, aunque ese debate también llegará “más pronto que tarde”.
Concepción Tarruella, de CiU, anunció la abstención de su grupo porque comparten el objetivo de garantizar a toda persona la dignidad durante la etapa final de su vida, pero considera que el texto del PSOE invade competencias autonómicas.
En nombre del Grupo de IU, ICV-EUiA, Cha: La Izquierda Plural, Caridad García pidió abordar “sin eufemismos” el debate sobre el derecho a morir con dignidad, y juzgó “lamentable” que los condicionantes religiosos, respetables pero pertenecientes a la vida privada, condicionen el voto.