FAMMA-Cocemfe Madrid reclama a la Dirección General de Universidades que exija a la Universidad Complutense de Madrid que destine una parte de sus presupuestos a garantizar el apoyo sociosanitario a los alumnos con discapacidad que así­ lo requieran, teniendo en cuenta que este organismo destina una partida presupuestaria para que la universidad madrileña desarrolle polí­ticas y servicios orientados a las personas con discapacidad.

Este servicio se vení­a ofreciendo en los campus de Somosaguas y de Ciudad Universitaria durante los últimos años, ya sea a través de una empresa o con la colaboración de becarios, y permití­a a los estudiantes con discapacidad contar con una ayuda esencial para hacer uso de los aseos de la Universidad, lo que aumenta la gravedad del hecho al atentar contra una de las necesidades más básicas de un ser humano, que en el caso de muchas personas con discapacidad resulta imposible de llevar a cabo sin colaboración, lo que afecta gravemente a sus posibilidades de integración en la comunidad universitaria.

“No se puede estar apoyando la discapacidad por un lado con la creación de un organismo que supuestamente ayuda al colectivo, y al mismo tiempo quitarles las ayudas para integrarse en la comunidad universitaria”, apunta el presidente de FAMMA-Cocemfe Madrid, Javier Font.

En la actualidad son los padres los que tienen que acercarse cada cierto tiempo a la universidad para acompañar al baño a sus hijos como consecuencia de la desaparición de este apoyo. Mientras tanto, la Universidad no ha trasladado ninguna solución a los afectados al respecto y ni tan siquiera han planteado cualquier otra alternativa que facilite la integración de estas personas y no se tenga que ver obligadas abandonar la universidad.

La Federación no entiende la existencia de una oficina de atención a las personas con discapacidad en el seno de la Universidad, cuando por otro lado la propia UCM, a través del vicerrectorado de estudiantes, se elimina esta función de apoyo. Es por ello que Desde la Federación no se descartan protestas públicas en la Universidad solicitando la reposición este servicio imprescindible para las personas con discapacidad.

Y es que la base número 6 de la Convocatoria 18/2012, bajo el epí­grafe Actividades a desarrollar, incluye entre ellas la “colaboración en otras tareas de apoyo a la discapacidad realizadas en la OIPD, excluidas en todo caso tareas de apoyo socio sanitario”. La Federación considera carente de toda empatí­a y responsabilidad social la decisión de incluir esa excepción totalmente discriminatoria, teniendo en cuenta la extrema necesidad de apoyo por parte de estas personas con discapacidad, y exige la reposición de este servicio.

“Si el Vicerrectorado ha estimado innecesario este servicio, no nos queda más remedio que acudir al origen de los presupuestos con los que cuenta este eslabón de la administración universitaria. Es por ello por lo que exigimos a la Dirección General de Universidades un compromiso que asegure la puesta a disposición de los estudiantes con discapacidad de este imprescindible apoyo”, afirma Font.