FAMMA hace un llamamiento para recuperar los valores sociales desde la educación infantil
FAMMA-Cocemfe Madrid, hace un llamamiento a la sociedad para recuperar y llenar de contenido uno de los valores que más nos distinguen como seres humanos: la solidaridad. En la Declaración del Milenio de las Naciones Unidas (resolución 55/2 de la Asamblea General) se reconoció que la solidaridad es uno de los valores fundamentales esenciales para las relaciones humanas en el siglo XXI.
La solidaridad se defiende como garantía de la paz mundial. Por ello, se escogió el día 31 de agosto para su celebración, coincidiendo con el aniversario del movimiento social independiente “Solidaridad” (31 de agosto de 1980, Polonia), cuya importancia mundial fue reconocida, en particular, con la concesión del Premio Nobel de la Paz a su dirigente Lech Walesa.
Javier Font, presidente de FAMMA, opina que “el momento en el que vivimos nos indica que la solidaridad es la mejor fórmula para salir adelante en momentos difíciles, si queremos generar bienestar social o no perder el que tenemos. La verdadera solidaridad, es aquella que está llamada a impulsar los vientos de cambio que favorezcan el desarrollo de los individuos, está fundada principalmente en la igualdad de oportunidades que une a hombres y mujeres. Esta igualdad es una derivación directa e innegable de la dignidad del ser humano, que pertenece a la realidad intrínseca de la persona, sin importar su raza, edad, sexo, credo, nacionalidad o condición física”.
En los últimos tiempos se insiste en la necesidad de establecer relaciones solidarias porque la época que nos ha tocado vivir es un tiempo en el que las desigualdades están a la orden del día. La famosa globalización está teniendo consecuencias desastrosas a muchos niveles. “La solidaridad es la señal inequívoca de que las personas, de cualquier condición, no están solos y de que tampoco pueden vivir solos, porque el hombre, social por naturaleza, no puede prescindir de sus iguales; no puede alejarse de las personas e intentar desarrollar sus capacidades de manera independiente. Todos necesitamos de todos en algún momento de nuestra vida”.
El sistema actual, basado en una economía globalizada, comporta situaciones de injusticia social y económica. Lo peor que se puede hacer es inculcar valores superficiales que sirvan solo para ser más competitivos o para ganar mucho dinero, tener una buena casa o un buen coche. Pararse a pensar de vez en cuando, es bueno para darse cuenta de que, tras todo esto, hay algo más importante como pueden ser las personas, el ser humano, sus necesidades y la de impulsar la solidaridad para el bienestar de todos.
Ante la celebración del Día Internacional de la Solidaridad, el próximo martes, 31 de Agosto, FAMMA insiste en que: “la solidaridad debe ser en todas las personas una constante. Ser una realidad diaria. Así la disposición de solidaridad con otras personas debe ser parte inamovible de nuestros actos diarios. Debe convertirse en hábito, en virtud, en modus vivendi. La solidaridad no es una serie de actos aislados encaminados a ayudar al prójimo. La solidaridad debe ser una actitud personal, una disposición constante y perpetua de tomar responsabilidad por las necesidades ajenas”.
Desde FAMMA-Cocemfe Madrid hacemos un llamamiento a la sociedad civil con el fin de impulsar el sentimiento solidario para el desarrollo de cualquier sociedad en beneficio del bienestar social y en la generación e igualdad de oportunidades. La solidaridad debe ser una toma de conciencia orientada hacia la acción y destinada al constante mejoramiento de la situación de la sociedad en general y de las personas con discapacidad en particular a partir de la generación de oportunidades que les permita hacerse un hueco en la sociedad.