Un estudio revela que una de cada tres mujeres con discapacidad no acude nunca al ginecólogo y el resto acude menos de lo que debería ir. A pesar de que los profesionales hacen mucho hincapié en la necesidad de hacerse las revisiones preventivas.

Esto se debe, como expresan algunas mujeres con discapacidad, al no contar con consultas accesibles. Únicamente Madrid, Andalucía y, próximamente, Aragón cuentan con alguna consulta adaptada o algún protocolo de atención a pacientes con discapacidad.

Y todo se debe al concepto erróneo que hay en la sociedad de que las mujeres con discapacidad no tienen relaciones sexuales o que no pueden ser madres. Aunque hay otros motivos. Todo se mueve dentro del campo de la desinformación y los prejuicios.

Por esta razón, las mujeres con discapacidad se aúnan para juntar sus voces y pedir el fin de las barreras físicas y sociales.