En la revista “Neuron” se puede hallar un pequeño artículo donde se explica que los modelos del lenguaje de gran tamaño (LLM) serían capaces de llegar a descubrir avances que al propio ser humano le constaría llegar a ellos. Con lo que, a los neurocientíficos se les plantea la siguiente cuestión: o se asocian con la inteligencia artificial o puede que su trabajo se quede obsoleto.

Abordando el desarrollo de medicamentos, por ejemplo, se puede usar un LLM especializado en genética con un LLM en neuroimagen para descubrir moléculas candidatas prometedoras para detener la neurodegeneración. El neurocientífico sólamente adoptaría el papel de dirigir el proyecto y verificar los resultados obtenidos.

Lo que demuestra que la ciencia se acrecenta para luchar contra enferemedades discapacitantes y que ayudará a que la persona con discapcidad gane en autonomía personal. Únicamente es necesario un cambio cultural.