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En esta época estival aumentan las reservas de billetes en cualquier medio de transporte: autobús, tren o barco para poder disfrutar de las merecidas vacaciones. Una acción que debería resultar fácil pero que para los viajeros con discapacidad se hace más complicada.

Hasta la fecha existen múltiples estaciones que no son accesibles y muchos vehículos que no cuentan con las medidas necesarias para incorporar en ellos las sillas de ruedas.

En el caso de los trenes, el número de viajeros de tren en sillas de ruedas dependerá de su longitud. Estas plazas deben de ser más ancha, no contar con asiento y tener respaldo. Igualmente, el usuario deberá llevar un cinturón de seguridad de tres puntos de anclaje.

Son viajeros con preferencia para subir al tren. La tripulación les debe ayudar a pasar de la silla de ruedas al asiento y guardar la silla de ruedas durante el viaje. Y debe de contar con baños adaptados.

En el caso de los autobuses, deberá de tener plazas reservadas siempre situadas junto a los accesos al vehículo, con los medios precisos para simplificar el acceso con la silla. La superficie del autobús no podrá ser deslizante y los bordes de los escalones u otros obstáculos que pueda haber deberán estar adecuadamente señalizados.

Las empresas titulares de transporte marítimo tendrán que contar con al menos un barco accesible a las personas con discapacidad para cada línea regular de viajeros, que esté disponible cada día de servicio y en cada sentido del viaje.

 

La compra de los billetes

Los usuarios pueden adquirir estos billetes a través de la web de su correspondiente compañía de transporte, a través de atención telefónica o en las taquillas. Por ejemplo, en el caso de la venta ‘online’ de Renfe, para reservar una plaza H los usuarios tendrán que marcar esa opción (ubicada debajo de la estación de destino) para consultar qué trenes tienen disponibles esas plazas.

La ley no especifica cómo se deben habilitar los puntos de venta, pero sí exige que allí dónde haya mostradores y puntos de venta de billetes deberá haber uno de ellos, como mínimo, que sea accesible