Utilizan tecnología propia de la industria aeroespacial para mejorar la precisión de las cirugías de la nariz
La empresa española Nasal ha desarrollado un novedoso ‘software’ que utiliza herramientas tecnológicas propias de la industria aeroespacial para simular el flujo del aire dentro de la cavidad nasal y mejorar la precisión de las intervenciones quirúrgicas de la nariz que se realizan para resolver problemas respiratorios.
Esta herramienta, que ha sido probada por primera vez por el Hospital Ruber Internacional de Madrid, integra distintas tecnologías para recrear en tres dimensiones la cavidad nasal, a partir de la imagen obtenida a través de un TAC o una resonancia magnética, y obtener valores de presión, velocidad y temperatura que se producen en su interior durante la respiración. Para ello es clave la tecnología CFD, una técnica de dinámica de fluidos que se utiliza desde hace años en la industria aeroespacial en el diseño de misiles, palas de aviones o cualquier otro desarrollo en el que es importante verlos fenómenos físicos del aire. “El objetivo era desarrollar un instrumento capaz de ayudar a los profesionales sanitarios en la toma de decisiones”, ha reconocido Guillermo Sanjuán, responsable de Nasal.
Sobre todo, según ha añadido el jefe de la Unidad de OtorrinoLaringología del Hospital Ruber Internacional de Madrid, Néstor Galindo, autor de la primera cirugía realizada a partir de esta tecnología, porque en determinados pacientes era difícil conocer lo que sucedía cuando el aire entra por la nariz. “Hasta ahora disponíamos de la rinomanometría o de la rinometría acústica como métodos objetivos de valoración, pero tanto en un método como en otro adolecían de alguna carencia. Y este sistema lo que permite es aunar técnicas de imagen con técnicas de dinámica de fluidos”, ha explicado.
Por último, Galindo reconoce que la técnica no será necesaria en todas las rinoplastias ya que “hay casos en los que está claro que hay una gran desviación del tabique nasal, que es la que motiva los problemas para respirar”. Sin embargo, hay casos en los que puede haber algún otro problema o inflamación para cuya identificación era necesaria una técnica más destructiva.