Un único refresco azucarado al…

En la imagen, refrescos azucarados de naranja y limón.

El consumo diario de una única lata de refresco azucarado podrí­a ser suficiente para aumentar en un 22% el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Así­ lo revela un estudio llevado a cabo por investigadores del Colegio Imperial de Londres (Reino Unido) y publicado en la revista ‘Diabetologia’.

Precisamente, en palabras de la doctora Dora Romaguera, investigadora principal del estudio, “los refrescos azucarados, si bien aportan energí­a, no sacian, por lo que la persona aumenta su ingesta de alimentos, lo que a la larga puede derivan en obesidad; sin embargo, la relación entre el consumo de refrescos azucarados y la diabetes va más allá de la mera vinculación de la enfermedad con la obesidad ya que el azúcar de estas bebidas se asimila de una forma muy rápida y causa respuestas agudas de insulina y, a largo plazo, estos golpes de azúcar pueden provocar una resistencia a la insulina”.

En este sentido, los resultados del citado estudio evidenciaron que el consumo diario de una lata (33 centilitros) de bebida gaseosa azucarada conlleva un aumento del riesgo de diabetes tipo 2 del 22%. La doctora Romaguera concluye que, “a la luz de las evidencias, debe recomendarse un mayor grado de información de la población sobre los efectos de este tipo de bebidas para que sean consumidas con moderación”.