Sólo el 6% de los…

Solo el 5,93% de los obligados tributarios principales del Impuesto de la Renta de las Personas Fí­sicas (IRPF) son personas con discapacidad.

Así­ lo recoge la publicación ‘La discapacidad en las estadí­sticas del Impuesto sobre la Renta de las Personas Fí­sicas. Ejercicio 2011 (declaración 2012)’, promovida por el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi). El trabajo se basa en un estudio elaborado por los expertos fiscalistas Isidoro Martí­n Dégano y Domingo Carbajo Vasco. No obstante, el estudio aclara que la incidencia de la discapacidad en este impuesto es “muy superior”, particularmente por el hecho de que el mí­nimo por discapacidad supone que el 11,85% de todas las declaraciones, reduciendo la base imponible en 7.809 millones de euros y apareciendo en un total de 1.618.739 declaraciones y con un medio de mí­nimo por persona declarante de 6.834 euros. Según el Cermi, se trata de la primera investigación de este tipo, cuyo objetivo es proporcionar información acerca de la incidencia social y económica del fenómeno de la discapacidad, tal y como se deduce de las estadí­sticas del IRPF, elaboradas por la Agencia Estatal de Administración Tributaria. Los datos estadí­sticos del informe son los correspondientes al ejercicio 2011, declaración 2012. Además de proporcionar información desglosada de estas estadí­sticas, utilizando como eje la variable discapacidad, el estudio las analiza y, en particular, extrae conclusiones que permitan comprender mejor las relaciones entre el fenómeno social de la discapacidad en España y el impuesto, sin duda, de mayor incidencia social, económica y polí­tica del sistema tributario, que como recuerda el Cermi, es el IRPF. “La discapacidad, como situación que produce una reducción notable de la capacidad económica sometida a gravamen, y siendo el principio de capacidad económica uno de los fundamentales a la hora de establecer un impuesto en el sistema tributario español, permea la mayor parte de nuestros gravámenes, los cuales deben adaptar su objeto imponible a esa menor capacidad contributiva que la discapacidad implica”, concluye la entidad.