Sobre ruedas en el agua
“PneuChair” es la nueva silla de ruedas sumergible e impermeable. Pesa 36 kilos (un tercio del peso de una silla de ruedas eléctrica convencional), puede viajar a ocho kilómetros por hora y está propulsada por aire comprimido.
Las sillas de ruedas electrónicas son prácticas y eficientes, pero carecen de una condición: impermeabilidad. «Las sillas de ruedas no funcionan en condiciones de humedad, por sus baterías y su electrónica», razonó Rory Cooper, director del Laboratorios de Investigación de la Ingeniería Humana de la Universidad de Pittsburgh, y empezó a trabajar.
Aún con solicitud de patente pendiente, su fuente de energía es el aire a alta presión, en reemplazo de una ingeniería electrónica pesada y permeable. Su tiempo de recarga es de diez minutos, otro aspecto destacable en comparación a dispositivos de movilidad eléctrica que demandan una carga de hasta ocho horas.