Repetición espaciada. Recordar más y…

Repetición espaciada. Recordar más y mejor.

Cuando estudiamos, es común intentar memorizar todo de una sola vez con largas sesiones de estudio que, a menudo, no dejan resultados duraderos. Sin embargo, hay una técnica que puede potenciar nuestro aprendizaje y la capacidad de retención: la repetición espaciada. En esta entrada, exploraremos cómo funciona esta estrategia y cómo aplicarla para reforzar lo aprendido de manera efectiva.

¿Qué es la repetición espaciada?

La repetición espaciada es una técnica de memorización que consiste en ver el material en sesiones pequeñas y distribuidas a lo largo del tiempo, puesto que esto hace que la información se asiente mejor en la memoria. La repetición espaciada propone una distribución de las sesiones de repaso de manera que revises la información justo antes de olvidarla, según la Teoría de la Curva del Olvido. De esta forma, para recuperar a la información almacenada, se necesita un esfuerzo mayor y más consciente.  El cerebro no tiene la información tan fresca estudiar y accesible como si la acabase de estudiar de inmediato, lo que obliga a realizar un esfuerzo más consciente para recordarla. Así, cada vez que se revisa el material, el aprendizaje se refuerza, y se ponen en práctica las habilidades necesarias para acceder y recuperar la información almacenada en nuestro cerebro.

¿Cómo aplicar la repetición espaciada?

La idea principal de la repetición espaciada es estudiar separando cada vez más las sesiones de repaso para forzarnos a recordar de forma activa lo estudiado.  Un ejemplo de planificación podría ser el siguiente:

  • Primera repetición: 1 día después de aprender el material.
  • Segunda repetición: 3 días después de la primera.
  • Tercera repetición: 7 días después de la segunda.
  • Cuarta repetición: 16 días después de la tercera.

Después de un mes, puedes espaciar aún más las repeticiones, de manera progresiva, como 2-3 meses y luego cada 6 meses, según tus necesidades personales. Los tiempos entre sesiones y la duración del aprendizaje dependen de cada persona. Lo importante es empezar repasando seguido y, poco a poco, aumentar el tiempo entre sesiones de repaso para trabajar la capacidad de recuperar la información estudiada.

En conclusión…

La repetición espaciada es una estrategia muy interesante para reforzar lo aprendido y mejorar la memoria, la recuperación de la información y el aprendizaje a largo plazo. Al distribuir las sesiones de repaso estratégicamente, justo antes de que olvidemos lo aprendido, logramos fortalecer las conexiones neuronales y desarrollar un acceso más consciente a la información almacenada. Es importante ajustar los intervalos según tus necesidades personales y del momento.

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Nos vemos en la siguiente entrada del blog, dentro de quince días. Recuerda, la educación es la clave para el desarrollo personal a lo largo de toda la vida.

Referencias bibliográficas