Reiteran que comer despacio reduce…

La revista Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics ha comprobado cómo afecta la velocidad a la que se mastica influye directamente en uno de los problemas más crecientes en el mundo, la obesidad.

El estudio de la revista americana verifica que la velocidad a la que comemos es importante, demostrándolo con dos grupos de personas. Uno compuesto por individuos cuyo peso es normal y otro grupo compuesto por personas con sobrepeso. Durante el experimentos, los dos grupos consumieron dos comidas, en la primera se les advirtió de que ingirieran con tiempo y masticando bocados pequeños. La segunda fue al contrario, comer rápido y sin pausas. Los resultados fueron que la primera comida sació más a todos grupos y se sentí­an menos hambrientos una hora después. “Es posible que las persona con sobrepeso u obesidad se sintieran más autoconscientes, y esto les hiciera comer menos durante el estudio” explicó Meena Shah, del departamento de Kinesiologí­a de la Universidad Cristiana de Texas (EEUU) pero por otro lado también es posible que al sentirse parte de un estudio les influyera cómo les iban a ver los demás.

Por último, el análisis también afirma que los mecanismos sociales que influyen en lo que decidimos consumir están presentes incluso cuando comemos solos o estamos en el trabajo, aunque no seamos conscientes de ello. La obesidad es un problema que aumenta en el mundo entero. Los cambios en la dieta y en los estilos de vida son las mayores causas de este mal. Lo más importante es lo que comemos no con quién.