Hasta 60.000 plantas cultivarán el próximo año los alumnos del Instituto Valenciano de Acción Social en los viveros que la entidad tiene en Cheste para los jardines de Valencia. De esta manera, se pretende ayudar en la integración laboral y la formación de discapacitados psí­quicos, además de suponer un ahorro importante para las arcas municipales, que la alcaldesa Rita Barberá cifró ayer en un 50% sobre el presupuesto de este año en reposición de flores.

La primera autoridad local firmó un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y la Conselleria de Bienestar Social con la titular de este departamento, Asunción Sánchez. Su primera aplicación práctica sucederá hoy con la sustitución de las murcianas y geranios del puente de las Flores por las plantas de Pascua. Los alumnos del instituto se han encargado de cultivarlas, según comentó la concejala de Jardines, Lourdes Bernal.

La intervención no se limitará al puente, el más representativo de la ciudad en lo que se refiere al ornato con flores, sino que se extenderá a 150 de los 800 jardines que hay repartidos por la ciudad. Bernal dijo que los alumnos trabajarán básicamente en los viveros de Cheste, donde disponen de tres túneles de 800 metros cuadrados cada uno, aunque se ha previsto que realicen prácticas en algún jardí­n de la ciudad, donde se piensa sobre todo en un tramo del cauce.

La consellera de Bienestar Social citó la opción de ampliar las instalaciones en otra propiedad en Dos Aguas. El Ayuntamiento se encargará de dar todo el material que necesiten los alumnos, que recibirán un sueldo durante su formación.

Valencia gastará este año 70.000 euros en la reposición de flores. De esta cantidad, 38.000 euros se destinan al puente de las Flores, una instalación que Barberá defendió al señalar que está «orgullosa del puente», al referirse a casos de otras ciudades donde estos adornos que sirven de atractivo turí­stico son mucho más caros.

Los alumnos del instituto ya colaboran con algunos Ayuntamientos y también se encargan de la reposición de plantas en los jardines de un campus universitario. La demanda que ahora presentará Valencia será mucho más elevada, aunque la consellera confió en que darán abasto a las peticiones. En todo caso, si hace falta, aseguró que aumentarán la plantilla que ahora ronda las 114 personas, de las que el 81% son discapacitados psí­quicos.

El convenio firmado ayer es de un año pero se prorrogará con seguridad varios más. El gasto en el puente de las Flores ha sido duramente criticado por la oposición, pese a que el coste de mantenimiento ha menguado desde su inauguración en 2002. La última modificación se realizó con el concejal Ramón Isidro Sanchis al frente de Parques y Jardines, cuando redujo el gasto de 136.000 a 60.000 euros al eliminar el ciclamen que se plantaba en primavera y reducir el número de geranios y murcianas.

El ahorro en el gasto de reposición de flores no se destinará a otras partidas, sino que redundará en beneficio de los propios jardines. Bernal aseguró que las contratas emplearán ese dinero en mejoras otros aspectos de los parques. Sobre las plantas del puente de las Flores que se quiten hoy, se aprovecharán en otros jardines y en los viveros de Cheste para ampliar la producción.