‘Por favor, tí­rame al contenedor, al Estado no le importa’. Esta es la pancarta a través de la cual una persona con discapacidad solicita que lo echen a la basura al sentirse denigrado e impotente ante los recortes que dejan a las personas dependientes sin las ayudas necesarias. De hecho, en estos momentos la Generalitat Valenciana adeuda a las personas dependientes un total de 15 millones de euros.

Aunque el argumento no puede ser más actual y real, la historia es ficticia y forma parte de un ví­deo realizado por la coordinadora de las asociaciones de personas dependientes de la Comunidad Valenciana en Castellón. Este impactante ví­deo se ha llevado a cabo como acto preparatorio para celebrar el Dí­a Internacional de las Personas con Discapacidad, que tendrá lugar el dí­a próximo 3 de diciembre.

En este ví­deo se quiere reflejar cómo la administración se desentiende de las personas dependientes. Por ello la coordinadora ha simulado en este documento audiovisual que tira un discapacitado a la basura “porque ya no sirven para nada”.

El discapacitado que va en una silla de ruedas es tirado literalmente al contenedor, un lugar donde los responsables de esta coordinadora temen que acabe todas las ayudas a los dependientes, a causa de los recortes. “Al contenedor va todo lo que nos sobra, comida, papeles… y personas. Porque no queremos terminar así­: en el camión de la basura como si fuésemos realmente inútiles, inservibles, sin capacidad ni dignidad, hemos creado este ví­deo”, justifican desde la coordinadora.

Las organizaciones que forman parte de esta coordinadora atienden a más de 2.300 personas en Castellón, una provincia que cuenta con alrededor de 60.000 personas con discapacidad. Afaní­as, Afaniad-Vall d’Uixí², Afdem, Aspas-Castellón, Asociación de Personas Sordas de Castellón, AEMC, Ateneo, Cocemfe Maestrat, Fundación Aspropace, Fundación Sí­ndrome de Down Castellón,Frater Castellón y ONCE son las organizaciones que forman parte de esta coordinadora de carácter autonómico.