En la actualidad existen más de 45.000 aplicaciones para ‘tabletas’ o teléfonos inteligentes que tratan aspectos relacionados con la salud.

“La mayorí­a de las aplicaciones son pequeñas y abordan cuestiones generales como la medición de la tensión o controlar la diabetes. El hecho de que haya más de 45.000 habla a las claras de su implantación”, explicó Ana Marí­a Rodrí­guez de Viguri, presidenta de íliad Salud.

A pesar de esa implantación, Rodrí­guez de Viguri lamenta que España todaví­a se encuentra a mucha distancia del resto de paí­ses, así­ como que la mayorí­a de sus usuarios sean jóvenes “cuando quienes más las necesitarí­an serí­an personas mayores de 50 años”. “Es un fenómeno menos extendido en España que en el resto del mundo, especialmente en los paí­ses anglosajones que es donde tienen una mayor implantación. Por eso, hay que trabajar para que estas aplicaciones sean accesibles a todo el mundo”, subraya Rodrí­guez de Viguri.

Por último, estas aplicaciones no deben ser confundidas con “tratados médicos”, según Rodrí­guez de Viguri, ya que algunas personas buscan en estos instrumentos tecnológicos una ví­a donde encontrar información complementaria. “Hay que advertir que este tipo de aplicaciones no son enciclopedias médicas ni por intención ni por extensión. Quiere esto decir que lo que la gente encuentra en ella son consejos sobre la tensión o la diabetes nunca información detallada sobre enfermedades complejas”.