Los programas de ejercicio pueden…

Los programas de ejercicios diseñados para prevenir las caí­das en los adultos mayores también parecen evitar las lesiones causadas por esas caí­das, como sugiere un estudio publicado este martes en ‘British Medical Journal’. Las lesiones relacionadas con caí­das son muy comunes entre las personas mayores y una causa importante de dolor a largo plazo y deterioro funcional, además de aumentar el riesgo de ingreso en una residencia de ancianos y tener un alto costo económico.

Precisamente, los programas de ejercicios bien diseñados pueden prevenir las caí­das en los adultos mayores que viven en el hogar, pero hasta ahora, habí­a poca evidencia de que también ayudan a evitar que esas caí­das provoquen lesiones. Por ello, investigadores de Francia analizaron si estas iniciativas para evitar caí­das están asociadas con un riesgo significativamente menor de fracturas y otras lesiones.

La revisión incluyó 17 ensayos con un total de 2.195 participantes en el grupo de ejercicio y 2.110 en los grupos de control, con una edad media de 76 años y el 77 por ciento de los voluntarios eran mujeres. El ejercicio en dos de los ensayos fue el Tai Chi, mientras el resto se centró en la marcha, el equilibrio y funcional (ejercicio para la formación de las actividades realizadas en la vida diaria). La mayorí­a de los ensayos también incluyeron ejercicios de entrenamiento de fuerza/resistencia.

Asimismo, el examen reveló variaciones sustanciales en la definición y clasificación de las caí­das perjudiciales, por lo que definió cuatro categorí­as según la gravedas o atención médica. La mayor parte de las intervenciones de ejercicios tendieron a reducir las caí­das perjudiciales en todas las categorí­as, por lo que el ejercicio parece disminuir significativamente la tasa de caí­das que resultan en atención médica, lesiones graves y fracturas.

Por último, esta revisión proporciona evidencia de que los programas de ejercicios de prevención de caí­das en las personas mayores no sólo reducen las tasas de caí­da sino también previenen posibles lesiones derivadas de caerse en las personas mayores. Los investigadores dicen que este efecto parece más pronunciado para las lesiones relacionadas con caí­das más severas.