Los nefrólogos abogan por la detección temprana para mejorar la calidad de vida de los pacientes con enfermedad renal
La detección temprana de las enfermedades renales, acompañada de hábitos de vida saludables, es fundamental para mejorar la calidad de vida de los pacientes y ralentizar su progreso, según coincidieron en señalar los expertos que este jueves participaron en el encuentro celebrado en el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, organizado por la Sociedad Española de Nefrología.
Por ello, esta sociedad médica desarrolla la campaña ”˜Enfermedad renal y niños. Actúa pronto para prevenirla”™, que busca concienciar a la población sobre la importancia de la educación, la detección temprana y un estilo saludable en los niños para luchar contra el aumento del prevenible daño renal. Con motivo de la celebración hoy del Día Mundial del Riñón, la presidenta de la Sociedad Española de Nefrología, la doctor María Dolores del Pino, señaló que “las enfermedades renales afectan a millones de personas en todo el mundo, entre ellos muchos niños que podrían estar en riesgo de enfermedad renal en una edad temprana”. Por este motivo, insistió en que es necesaria una mayor investigación para acabar con “este asesino silencioso”. Por su parte, el presidente de la Asociación Española de Nefrología Pediátrica, el doctor Víctor Manuel García, recomendó que los niños realicen, al menos, 30 minutos de ejercicio para prevenir enfermedades, entre ellas las renales, ya que “el aumento del sedentarismo y de la obesidad infantil preocupan en extremo a la comunidad pediátrica”. La doctora María de la Oliva Valentín, médico adjunto de la Organización Nacional de Trasplantes, afirmó que “cada año se realizan entre 60 y 70 trasplantes renales pediátricos, de los cuales, el 25% son llevados a cabo con un riñón procedente de donante vivo, principalmente de la madre o del padre”. Además, declaró que probablemente ese niño tenga que volver a someterse a otro trasplante en el futuro porque no le aguantará el resto de su vida. Sobre los efectos de la enfermedad, el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones para la Lucha Contra las Enfermedades del Riñón (Alcer), el doctor Jesús Molinuevo, afirmó que aparte de los fallos renales, “el tiempo que se dedica a ocuparse de la enfermedad supondrá un retraso en su actividad escolar e intelectual”, así como “posibles problemas en el núcleo familiar”. Para solucionarlo, abogó por “una atención sociosanitaria integral para poder llevar la enfermedad”.