Los investigadores descubren un mecanismo…

En la imagen, una prueba para detectar tumores cerebrales.Un factor que hace a los cánceres de glioblastoma tan difí­ciles de tratar es que las células malignas de los tumores se reparten por todo el cerebro siguiendo las fibras nerviosas y los vasos sanguí­neos para invadir nuevas ubicaciones. Ahora, los investigadores han aprendido a apropiarse de este mecanismo migratorio, atacando el cáncer mediante el uso de una pelí­cula de nanofibras más delgadas que el cabello humano.

En lugar de invadir nuevas áreas, las células que migran se adhieren a las nanofibras de diseño especial y las siguen a una ubicación, potencialmente fuera del cerebro, en la que puedan ser capturadas y asesinadas. Usando esta técnica, los cientí­ficos pueden mover parcialmente tumores inoperables a ubicaciones más accesibles. A pesar de que no elimina el cáncer, la nueva técnica reduce el tamaño de los tumores cerebrales en modelos animales, lo que sugiere que esta forma de cáncer cerebral podrí­a un dí­a ser tratada más como una enfermedad crónica. “Hemos diseñado un polí­mero de nanofibras de pelí­cula fina que imita la estructura de los nervios y los vasos sanguí­neos como la que las células tumorales del cerebro normalmente utiliza para invadir otras partes del cerebro”, explica el investigador principal de este estudio, Ravi Bellamkonda, director del Departamento Wallace H. Coulter de Ingenierí­a Biomédica y de Tecnologí­a de Georgia de la Universidad Emory, en Atlanta, Estados Unidos.

Por último, el tratamiento del cáncer de glioblastoma multiforme (GBM) es difí­cil debido a que el cáncer agresivo e invasivo a menudo se desarrolla en partes del cerebro donde los cirujanos se muestran reticentes a operar. Incluso, si el tumor primario puede eliminarse, a menudo se ha extendido a otros lugares antes de ser diagnosticado.