Los excesos navideños conllevan un…

Los excesos en las comidas navideñas conllevan una media de aumento de peso de hasta 4 kilos por lo que los expertos recomiendan evitar los atracones e ingerir solo la cantidad de alimentos que necesita el cuerpo para mantener las funciones vitales, la actividad fí­sica y el nivel de deporte que se realice. Los atracones de comida tienen varias consecuencias negativas para la salud, ya que suponen un consumo de muchas calorí­as en un periodo corto de tiempo, aumentan la sensación de hinchazón y malestar generalizado, las digestiones se hacen muy pesadas y se prolongan a lo largo de todo el dí­a y de la noche, e incluso se pueden producir vómitos si la cantidad de alimentos es excesivamente elevada.

Por ello, la nutricionista de los Hospitales Universitarios HM Monteprí­ncipe y HM Torrelodones, Aránzazu Perales, aconseja realizar comidas moderadas. “Ningún alimento en exceso es bueno y tenemos varios dí­as de celebraciones, por lo que podemos seleccionar un dí­a para cada uno de nuestros alimentos navideños preferidos. De este modo, al final de las vacaciones habremos probado todo sin haber cometido excesos”.

Además es frecuente que algunas personas se pongan a dieta unos dí­as antes de estas fechas para poder comer más a gusto después, pero esta no es la mejor opción, incluso puede tener efecto contrario, pues este hábito no es saludable y sin estar asesorados por un experto es posible que se gane peso en vez de perderlo por no realizar un equilibrio correcto de los alimentos que se consumen y del gasto de energí­a que se realiza.

En estos dí­as hay que disfrutar de las reuniones familiares y las comidas especiales, pero siempre buscando un equilibrio. Por eso hay que consumir un volumen adecuado de alimentos que aporten saciedad con un aporte adecuado de nutrientes. Por ejemplo, de primer plato, Perales, propone tomar platos ricos en verduras, ya sean en forma de cremas, asadas o al vapor. Y de segundo, una carne o pescado pero en raciones más pequeñas.

En estas vacaciones también se abusa de turrones y otros dulces y establecer un lí­mite, sobre todo a los niños, es complicado. Hay que intentar buscar un punto medio y procurar controlar su ingesta entre horas, ya que un consumo excesivo puede hacer que luego no tengan hambre en las principales comidas del dí­a.

Además, “en el caso de las personas diabéticas los turrones sin azúcar son una buena opción, pero tampoco se debe abusar de ellos y las cantidades deben ser moderadas y similares a las de personas no diabéticas”, ha apuntado la nutricionista. Precisamente las personas con algunas patologí­as como la diabetes, sobrepeso u obesidad, son las que tienen que tener más cuidado estos dí­as e intentar controlar su peso y la ingesta de productos hipercalóricos.