Los españoles gastan 800 calorí­as…

En los últimos veinte años los españoles han reducido su ingesta en unas 300 calorí­as diarias pero también gastan 800 calorí­as menos que hace dos décadas, lo que provoca un “balance energético desequilibrado”. Así­ lo ha indicado hoy Javier Aranceta, profesor de la Universidad de Navarra y director del Curso de Verano de la Universidad Complutense de Madrid “Guí­as Alimentarias, estilos de vida saludables y promoción de la salud”, que se desarrolla estos dí­as en El Escorial (Madrid).

Los profesionales que integran la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria se encuentra trabajando en la revisión de las actuales guí­as alimentarias y el desarrollo de unas recomendaciones nutricionales más acordes a la población y estilos de vida actuales. “Debemos traducir a nivel poblacional los objetivos nutricionales más cientí­ficos. Nuestra finalidad es que esas recomendaciones lleguen al plato, en un entorno en el que hemos perdido el instinto de saber la cantidad de alimentos que debemos comer”, ha confesado el doctor.

Aranceta ha subrayado, en una nota de prensa, que la actividad fí­sica y el balance energético cobrarán más importancia en las nuevas guí­as de alimentación. “Movernos más es una de las asignaturas pendientes de buena parte de la población en España”, ha recalcado, así­ como mantener una alimentación “variada y equilibrada”.

La doctora Carmen Pérez Rodrigo, presidenta de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), ha dicho que “en la prevención y lucha contra el sobrepeso y la obesidad se deben tener en cuenta todos los factores que influyen en su desarrollo”. Para ello, ha abogado por un planteamiento “amplio” que centre los esfuerzos en la promoción de la actividad fí­sica, la educación en nutrición y hábitos de vida saludables, la dotación a la población de infraestructuras necesarias y favorecer oportunidades para desarrollar estilos de vida más saludables.

Por último, se ha abordado la importancia del agua como nutriente, ya que se trata de un elemento esencial para la mayorí­a de los procesos fisiológicos. Mantener una correcta hidratación, según los especialistas, es especialmente relevante cuando se realizan tareas intelectuales o que requieran la atención y estado de alerta de las personas. Así­, una deficiencia del 1 % del peso corporal se ha relacionado con disminución del rendimiento fí­sico, mientras que una deshidratación del 2 % puede afectar ya al rendimiento intelectual.