Los avances médicos permiten diagnosticar el 98% de los casos de anomalías cromosómicas durante el embarazo
La capacidad de detección y diagnóstico de casos de anomalías cromosómicas en el feto durante el embarazo ha aumentado del 30% a más del 98% en las últimas décadas como resultado de los nuevos avances tecnológicos y estudios médicos que existen en la Medicina Materno-Fetal.
Así se puso de manifiesto durante la ‘I Jornada de Actualización en Medicina Materno Fetal’, organizada en el Iberostar Grand Hotel Mencey por la Unidad de Medicina Fetal del Grupo Hospiten y que contó con la participación de más de cien profesionales sanitarios de todo el archipiélago. El especialista en Obstetricia y Ginecología del Grupo Hospiten y coordinador de la Jornada, Walter Plasencia Acevedo, aseguró que las técnicas que existen hoy día “permiten identificar desde el primer trimestre de gestación muchas anomalías o posibles complicaciones que pueden surgir durante el embarazo tanto en la madre como en el feto y establecer en muchos casos un tratamiento eficaz de forma precoz”.
Durante la primera ponencia sobre ‘Screening de anomalías cromosómicas. Actualización en estudios de ADN fetal en sangre materna’, Walter Plasencia hizo un repaso de los nuevos estudios ecográficos y analíticos que han permitido dar un salto cualitativo en la detección de anomalías cromosómicas y ofrecer a los padres una información más detallada del estado del feto. Según explicó, el número de fetos que presentan algún tipo de anomalía cromosómica, entre las que se encuentra el síndrome de Down, ha aumentado en los últimos años debido a la relación directa que existe con la edad de la mujer embarazada, que se ha incrementado considerablemente.
Por último, a través de los estudios del ADN fetal en sangre materna, los profesionales médicos han conseguido complementar el diagnóstico de estas anomalías, apoyándose en el material genético del feto para ofrecer un asesoramiento más preciso. Lo importante, añade el doctor Plasencia, es que gracias a las nuevas técnicas “podemos ofrecer estudios más detallados con un diagnóstico mucho más preciso y asesorar a los futuros padres acerca del tratamiento más adecuado que, en algunos casos, pueden ser intervenciones prenatales que pueden salvar la vida del feto y mejorar su calidad de vida en el futuro”.