Los abogados se forman para mejorar la atención judicial a las personas con discapacidad
Un grupo de abogados ha participado en unas jornadas que pretendían formar a estos profesionales en la atención judicial a las personas con discapacidad.
La inauguración de las jornadas corrió a cargo del decano del Ilustre Colegio Provincial de Abogados de Pontevedra, Ramón Jáudenes, que destacó que para la abogacía es una preocupación constante el acceso a la justicia de las personas con discapacidad y, por ello, existe una gran tradición en la colaboración entre las entidades de la discapacidad y los Colegios de Abogados y el Consejo General de la Abogacía. Ramón Jáudenes agradeció la asistencia a los colegiados y ponentes, pues compartiendo sus conocimientos los abogados tratarán de buscar un futuro mejor y más digno para las personas con discapacidad y, si lo hacen también estarán mejorando la Administración de Justicia y, por extensión, mejorarán la abogacía. Actividades como esta encajan en el espíritu de un colegio que ya es, de por sí, solidario y comprometido al máximo con la función social de la abogacía. Las jornadas incluyeron un módulo formativo para abogados con dos mesas que abordaron la Convención Internacional sobre los Derechos de las personas con discapacidad en su dimensión teórica y práctica y el acceso a la Justicia y la capacidad jurídica de las personas con discapacidad, denunciando la muerte civil. Entre los ponentes estuvieron Carolina Villa, de la Fundación ONCE; Juan Pablo de la Fuente, de la Red de Juristas Plena inclusión; Jesús Acevedo, formador en derechos de las personas con discapacidad de Plena Inclusión Asturias; y Mayca González Collado, responsables del programa de atención a personas con discapacidad intelectual reclusas y ex reclusas de Plena inclusión Asturias. Las jornadas cuentan con la colaboración de Fundación ONCE, CERMI y FEAPS y forman parte de las actividades del Aula de Derechos Humanos de la Fundación Abogacía Española, que tiene entre sus finalidades facilitar un mayor y más adecuado conocimiento por parte de los abogados de las particularidades legales y de atención relativas a la asistencia jurídica con perspectiva de derechos humanos a ciertos colectivos vulnerables, entre ellos las personas con discapacidad.