Las personas en buena forma física cuando sufren un infarto viven más
El mantener una buena forma física es un signo de un buen estado de salud. Y si bien la mejora de la forma física, esto es, la práctica de ejercicio, es aconsejable para toda la población en general, resulta especialmente recomendable para aquellas personas con factores de riesgo cardiovascular.
No en vano, el riesgo de sufrir un infarto de miocardio es menor cuanto mejor es la forma física. Y a ello se aúna que, como muestra un estudio dirigido por investigadores de la Universidad John Hopkins en Baltimore (EE.UU.), cuanto mejor sea nuestra condición física, menor será la probabilidad de morir tras padecer un primer infarto. Como explica Michael Blaha, director de esta investigación publicada en la revista «Mayo Clinic Proceedings», «siempre hemos sabido que las personas en mejor forma física viven más, pero no teníamos pruebas que asociaran la forma física a la supervivencia tras un primer infarto. Tiene sentido, pero creemos que hasta nuestros resultados no había evidencias que finalmente constataran esta asociación». Tal es así que, como destaca Clinton Brawner, co-autor del estudio, «nuestros resultados sugieren que los pacientes que atienden a los pacientes con factores de riesgo cardiovascular deberían, simplemente, decirles: usted necesita empezar desde ya un programa de ejercicio para mejorar su forma física y sus probabilidades de supervivencia por si sufre un infarto».