Las células madre extraí­das de…

Las células madre mesenquimales extraí­das del tejido adiposo han mostrado seguridad y eficacia en su uso regenerativo para el tratamiento del infarto de miocardio, según una revisión de estudios publicada en la Revista Española de Cardiologí­a (REC).

La vicepresidenta de la Sociedad Española de Cardiologí­a (SEC), del Centro de Investigación Cardiovascular CSIC-ICCC del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona y primera firmante del artí­culo de revisión, la doctora Lina Badimón ha afirmado que “al tratarse de células metabólicas muy activas, cumplen un papel clave en la revascularización de los tejidos cardiacos dañados, evitan la muerte celular y secretan factores angiogénicos, es decir, aquellos que promueven la formación de nuevos vasos sanguí­neos a partir de otros preexistentes”.

Tras realizar los ensayos clí­nicos fase I y fase II, aún iniciales, el uso de las células madre mesenquimales preserva la función cardí­aca, mejora la perfusión y reduce el tamaño de las cicatrices del tejido dañado. Además, ya se han iniciado los ensayos clí­nicos en pacientes que han sufrido un infarto de miocardio o que presentan cardiopatí­a isquémica crónica o cardiomiopatí­a de origen no isquémico.