La quimioterapia se consolida como…

En la imagen, una persona se somete a un tratamiento de quimioterapia.La quimioterapia se ha consolidado como un tratamiento de referencia en los pacientes con cáncer de páncreas avanzado, tanto en primera como segunda lí­nea, tal y como señala la Sociedad Española de Oncologí­a Médica (SEOM) con motivo de su campaña bajo el lema “En Oncologí­a cada avance se escribe con Mayúsculas”.

En concreto, la quimioterapia sistémica proporciona un beneficio significativo en la supervivencia y mejora los sí­ntomas relacionados con la enfermedad incluso en ausencia de respuesta objetiva en comparación con el mejor tratamiento de soporte. El cáncer de páncreas, la cuarta causa de muerte por cáncer, tan solo representa entre el 2 y 3% de todos los tumores sólidos. En España, se diagnostican 4.000 casos nuevos al año y la incidencia es ligeramente superior en hombres que en mujeres. Es una de las neoplasias con mayor letalidad con una supervivencia a 5 años, incluyendo todos los estadios de la enfermedad, de entre el 5 y 6%.

Desde la década de los 80-90 del siglo pasado, la quimioterapia se ha considerado el tratamiento de elección del cáncer de páncreas metastásico al incrementar de forma significativa la supervivencia y mejorar la calidad de vida de los pacientes. En 2013, se publicó el estudio MPACT, que analizaba el papel de la combinación de gemcitabina con nab-paclitaxel frente a gemcitabina. Por primera, una combinación basada en gemcitabina mejoraba de forma significativa la supervivencia. En los pacientes tratados con nab-paclitaxel, se observaron largos supervivientes con supervivencia superior a 3 años.

Por último, en el año 2014, se ha consolidado el tratamiento con quimioterapia en pacientes que mantienen un buen estado general tras fracaso a una primera lí­nea de tratamiento. La publicación del estudio CONKO-003 y la comunicación de los primeros datos del estudio NAPOLI-1 han establecido las combinaciones de oxaliplatino o irinotecan nanoliposomal con 5-fluorouracilo como los tratamientos de referencia de segunda lí­nea en cáncer de páncreas.