La profesión médica teme por…

En la mesa redonda sobre la “Situación actual del Sistema Sanitario”, dentro de la III Convención de la Profesión Médica, se puso de manifiesto el temor de la profesion médica ante la previsión de una disminución del porcentaje del PIB destinado a Sanidad hasta alcanzar el 5,1% para los próximos años.

“La OMC sigue defendiendo un sistema sanitario universal y gratuito, y ha demostrado estar siempre al lado del SNS y así­ vamos a seguir actuando”, según señaló el coordinador del módulo sobre sistema sanitario, el doctor Carlos Arjona, enmarcado en la III Convención de la Profesión Médica, de esta forma dio paso a la Mesa que analizó, precisamente, la situación en la que se encuentra el SNS, y durante la que se mostró la preocupación ante un posible descenso del porcentaje del PIB destinado a Sanidad en los próximos años y que podrí­a quedar en un 5,1 por ciento en 2015.

Datos que, a juicio del moderador de la mesa, el doctor Kepa Urigoitia, presidente del Colegio de Médicos de ílaba, “harán inviable el mantener unos mí­nimos de efectividad y calidad de nuestro sistema sanitario y tendrá consecuencia negativas sobre la salud de los ciudadanos”.

En la mesa participaron, además, los doctores José Ramón Repullo, jefe del Dpto. de Planificación y Economí­a de la Salud de la ENS, quien ofreció una Reflexión preliminar y final; Luciano Vidán, presidente del Colegio de Médicos de La Coruña, quien ejerció de relator; Juan Luis González, presidente del Colegio de Médicos de Huelva, como discursor; y Francisco Parra, y Fernando Vizcarro presidentes de los Colegios de Médicos de Albacete y Tarragona, respectivamente, formularon a la mesa una serie de preguntas de candente actualidad respecto al tema sobre el que giró la mesa.

A partir de ahí­ y de cómo está evolucionando la situación, el doctor Urigoitia  considera que “en la Sanidad de este paí­s ha habido un antes y un después que, sin duda, no va a ser como el antes, de ahí­ el temor que nos embarga tanto a los médicos como la ciudadaní­a ante esta situación, no sólo por lo que a cada uno de nosotros compete, sino también por ese futuro del SNS y hacia lo que nos conduce”.

La situación fue analizada con más detalle por los doctores Luciano Vidán y Juan Luis González. A la vista de lo que sucede en el sistema sanitario, lo que más se deberí­a lamentar, en opinión del presidente del Colegio de Médicos de La Coruña, es que “no se haya respetado el carácter básico de normas como la Ley General de Sanidad y la Ley de Cohesión. El Estado tiene reservadas unas competencias de coordinación y dirección del SNS que no ha  desarrollado plenamente. El Gobierno no ha tenido voluntad de hacerse valer frente a las comunidades autónomas, y eso ha conducido a buena parte de los problemas que ahora sufrimos”.

El doctor Vidán considera que la cesión de competencias sanitarias a las CC.AA. “fue más rápida de lo que se creí­a”, fruto de lo cual, a su juicio, “han cometido un error al querer asentar su personalidad diferenciándose de las de al lado.  Se han desmarcado de lo que hacia el Estado. No tiene sentido que apenas hayan firmado acuerdos de mayor cooperación entre ellas, por ejemplo, para un I D conjunto, para ofrecer servicios compartidos en zonas fronterizas, para aplicar sistemas retributivos parecidos o para formar conjuntamente a los profesionales”. Para Luciano Vidán, parte del problema, en este sentido, radica en que “Las Comunidades Autónomas no han entendido del todo el carácter cooperativo del SNS”.

Otro de los problemas con las Autonomí­as, que puso sobre la mesa es que “el Estado tiene pocos mecanismos verdaderamente coactivos”

El sistema sanitario, a su juicio, “es un elemento dinamizador de la economí­a del paí­s, de la industria y de la tecnologí­a, que produce e investiga en España, a pesar de que es un gran consumidor de sus producto”. “Hemos creado soluciones estupendas, -añadió- que se están exportando a otros paí­ses, pero que no se aplican en todas las Comunidades Autónomas. Hemos pecado de falta de visión, porque no hemos sido capaces de lograr un acercamiento entre las empresas nacionales para constituir una gran multinacional española”.

Con respecto a la profesión médica, el doctor Vidán considera que debe asumir un papel  protagonista, no un asesoramiento secundario, porque únicamente los facultativos pueden identificar los procesos más eficientes y descartar los ineficientes. Solo los médicos pueden evaluar la oportunidad de utilizar determinados productos o servicios ?o la de no hacerlo- tanto en términos de eficacia como de eficiencia. Es el momento de las organizaciones, abiertas y responsables, coherentes en sus polí­ticas y acciones, y orientadas hacia los resultados medibles. Asumir proactivamente el objetivo de la sostenibilidad del sistema público de salud, será una señal distintiva que deberá adornar al médico del siglo XXI.

El presidente del Colegio de Médicos de Huelva, el doctor Juan Luis González, por su parte, se mostró convencido de que “no existe ningún plan para garantizar la supervivencia de nuestra actual Sanidad como pública, universal y gratuita.

El doctor González tiene la impresión, según puso de manifiesto, de que la actual gestión va a conducir al progresivo desmantelamiento del sistema sanitario público con el fin de instaurar un modelo similar a los de otros paí­ses europeos. En este marco, percibe que la búsqueda de la excelencia “se ve sobrepasada por la de la supervivencia: del sistema y de las personas”.

A juicio del presidente del Colegio de Médicos de Huelva, existe una necesidad de redefinir roles: gestores, financiadores, profesionales y beneficiarios, que deben volver a ser pacientes.

El doctor González finalizó su intervención asegurando que, “por encima de todo, los profesionales seguiremos siendo responsables de la defensa de los intereses de nuestros pacientes, definidos por sus necesidades”.

Finalizada la intervención de estos dos ponentes, llegó el turno de las preguntas, una de las cuales fue formulada por el doctor Francisco Parra, quien preguntó “si a partir de la actual crisis económica y las reducciones presupuestarias previsibles para los próximos años ¿qué modelo sanitario acabaremos teniendo? ¿qué reformas habrí­a que emprender para hacer el sistema actual sostenible? ¿se deberí­a denunciar la disminución del porcentaje del PIB que se va a destinar a Sanidad?”

Respondió a la cuestión el doctor Repullo, indicando que “con un porcentaje por debajo del 5,1 por ciento del PIB destinado a Sanidad, la medicina moderna, equitativa, solidaria no es posible”. De ahí­ que este experto instó a la sociedad a la reivindicación de una sostenibilidad externa. Al respecto, la profesión médica ha de ser clara y rotunda, y ha de defender ante la opinión pública unas lí­neas claras de contención, de exigencia a la sociedad de sostenibilidad externa.

El presidente del Colegio de Médicos de Tarragona, el doctor Fernando Vizcarro, planteó si “¿ayudarí­a a la sostenibilidad del SNS una financiación finalista?”. En su respuesta, el presidente del Colegio de Médicos de Huelva indicó que para considerar un presupuesto finalista se precisan dos requisitos: “realismo, ya que ningún presupuesto que no se ajuste a la realidad, no vale para nada, y hermetismo, en el sentido de estar blindados y que no se destinen a otras partidas distintas de la sanitaria”. A partir de ahí­, considera que sí­ serí­a necesario una financiación finalista”.