La playa de Poniente de…

Con silla de ruedas y sin ella. Con visión y sin ella. Con audición y sin ella. Todos, incluso los alérgicos al sol, tienen un hueco en la playa de Poniente de Gijón. La «más accesible del paí­s. Desde luego, el referente del Norte y uno de los de todo el paí­s», según la concejala de Bienestar Social de esta localidad, Eva Illán.

Una frase que, asegura, «no es mí­a. Es lo que me han dicho desde la Confederación de Personas con Discapacidad (Cocemfe)». Y la portavoz en Asturias de esta entidad, Mónica Oviedo, estaba a su lado para confirmarlo. La playa de Poniente será este verano «la más accesible del paí­s», porque ninguna persona, sea cual sea su discapacidad, se encontrará con barreras para tomar el sol o nadar. Esta total accesibilidad llega con la finalización del edificio de servicios múltiples para discapacitados. Un dispositivo de 80 metros cuadrados ubicado junto a Talasoponiente y que ha costado 170.000 euros y dos años de obras. Su arquitecto, Mariano Guisasola, fue el encargado de explicar todos los detalles a la comitiva que ayer lo visitó. Encabezada por la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, contó con la presencia, entre otros, de Carmen Fernández Amado, miembro de la Federación de Ataxias de España.