El informe ‘Envejecimiento y Salud’, que publicó la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomienda impulsar las polí­ticas dirigidas a la protección de la tercera edad ante el aumento de la longevidad, al tiempo que lamenta que la sociedad intuya como “gastos” los presupuestos dirigidos a los mayores, cuando son “inversiones” para dotarles de mayor capacidad.

Margaret Chan, directora general de la OMS, asegura en el prólogo de este informe que “por primera vez en la historia, la mayorí­a de las personas pueden aspirar a vivir más allá de los 60”, y hace referencia a “cambios necesarios” en las polí­ticas de salud frente al envejecimiento de la población. También remarca que el envejecimiento saludable no es sólo la ausencia de enfermedades, sino ser útiles para la sociedad y tener capacidad plena para desenvolverse por sí­ mismos.

En este contexto, la OMS lanza una serie de medidas para que sean atendidas por los gobiernos, como asegurar el acceso de los mayores a medicinas o que los servicios de salud que precisen puedan situarse lo más próximo posible a los domicilios de estas personas, cuando no puedan ser administrados en el hogar.

También aconsejan mejorar los salarios y la formación de las personas que se dedican profesionalmente a cuidar a los mayores, mediante la creación de “trayectorias profesionales” que permitan el ascenso de quienes se dedican a esto. Para la responsable mundial de la OMS, el informe presentado y las diferentes estrategias que se proponen en él son capaces de modificar la forma en la que se percibe a la ancianidad mediante polí­ticas sociales y de salud que han de permitir que los mayores sirvan activamente a la sociedad con su participación.