La ley de accesibilidad obliga…

La nueva ley de accesibilidad, que transpone seis directivas europeas, va dirigida a fomentar la inclusión y a eliminar las barreras que se pueden encontrar para que todas las personas puedan acceder a los productos y servicios regulados.

Por ello, la banca se ve obligada a tratar con las compañías proveedoras de terminales de pago para que adapten cajeros automáticos, máquinas expendedoras de billetes o lectores electrónicos. También las entidades que ofrecen créditos al consumo, hipotecas y servicios de inversión, como asesoramiento y gestión del dinero, suscripción de fondos de inversión o la compra de valores. Igualmente, afectará a las entidades que prestan servicios de comercio electrónico.

Con el objetivo de que puedan ser utilizados por cualquier tipo de personas y la información de los productos que ofrezca la entidad puedan ser entendidos por todos los colectivos posibles.

 La norma detalla que el incumplimiento de los requisitos de accesibilidad conllevará multas que pueden ir desde 301 euros hasta un millón. Pero entrará en vigor, para productos nuevos, hasta junio de 2025.