La incorporación de la usabilidad…

El Centro Nacional de Tecnologí­as de la Accesibilidad (CENTAC) apuesta por integrar las tecnologí­as de la accesibilidad en el funcionamiento de las empresas para generar conciencia social y mejorar la rentabilidad de los trabajadores.

Así­ lo explica Juan Carlos Ramiro, director de Accesibilidad de CENTAC en una entrevista realizada por Computer World University. “En muchas empresas hay empleados mayores o con algún grado de dificultad visual o auditiva”, apunta Ramiro. “Por eso, introducir tecnologí­as que sean accesibles y fácilmente usables les ayudan a mejorar su rentabilidad, pero al mismo tiempo, sirven para que las empresas se conciencien y desarrollen productos y servicios accesibles”, añade el portavoz de CENTAC. Ramiro también destaca la oportunidad de negocio que supone la accesibilidad para las empresas. “Muchas desconocen las posibilidades que representa incorporar lo social a sus desarrollos, pero no estamos en una época en la que se puedan permitir el lujo de excluir a nadie del mercado”, considera el director de Accesibilidad de CENTAC.

Un buen ejemplo es el comercio electrónico, en el que el cliente pasa de estar en la calle a ser un consumidor virtual, “si no se entera de lo que le están ofreciendo, la empresa se queda sin unos cuantos millones de euros”, sentencia el experto en accesibilidad. Tecnologí­a social y Tecnologí­a Accesible. Juan Carlos Ramiro, entrevistado por Marlon Molina, director de Computer World University, define como tecnologí­a social toda tecnologí­a que repercute en beneficio de la sociedad “en su globalidad o en un grupo social amplio”. La accesibilidad, por su parte, “es una caracterí­stica que deben incorporar las tecnologí­as sociales para que puedan ser utilizables por todas las personas”, matiza Ramiro. “Las tecnologí­as más fácilmente usables son las que más desarrollo y más implantación social tienen”, destaca el director de Accesibilidad de CENTAC.

Ramiro pone como ejemplos la aparición de Windows 95, el diseño simple pero altamente eficaz de Google o el sistema de mensajerí­a WhatsApp, “que permite que una persona de 80 años pueda comunicarse con su familia sin consultar ninguna instrucción”.