Juegos para mejorar la motricidad…

Los niños y niñas, en ocasiones, pueden presentar dificultades para agarrar correctamente el lápiz, atarse los cordones o coger los cubiertos. Esto puede deberse a una falta de control de la motricidad fina.

El concepto de motricidad fina, como describe Benzant (2015), se refiere a los movimientos de la pinza digital y pequeños movimientos de la mano y muñeca, así como de una mejor coordinación oculomanual (la coordinación de la mano y el ojo).  García y Batista (2018) añaden que se refiere a los movimientos realizados por una o ambas manos, que no tienen una amplitud sino que son movimientos de más precisión. La motricidad fina implica un nivel elevado de maduración y aprendizaje.

Por todo ello, se proponen una serie de juegos para realizar con los niños y niñas con la finalidad de potenciar esta habilidad:

Twister de dedos
 Este juego tiene la misma dinámica que la versión original de Twister pero utilizando únicamente los dedos de ambas manos. Además de potenciar la motricidad fina, ayuda a distinguir la mano derecha de la izquierda.
Este juego se puede crear de forma sencilla. Si pinchamos en la imagen nos redirigirá a un tablero imprimible.

 

Juegos con plastilina
Al cortar, aplastar, estirar, amasar y dar forma con nuestros dedos a la plastilina, además de potenciar la creatividad estamos realizando una actividad que estimula el área psicomotriz.
Es una actividad muy utilizada cuando el niño o niña va a comenzar a escribir o se observa que aparecen dificultades con el agarre del lápiz. Para ello, se hace especial hincapié en la pinza digital (control preciso y coordinación de los dedos índice y pulgar) creando formas como esferas o presionando con estos dedos para hacer figuras planas.

 

Origami
El arte de la papiroflexia trasladado a los niños y niñas tiene grandes beneficios. No solo mejorando la fuerza y control de los dedos, sino también la planificación, secuenciación de pasos y concentración.

Juego de enhebrar
Son aquellos juegos en los que se debe atravesar los agujeros de una estructura de madera o cartón con un material, que normalmente es un cordón o hilo. Para mayor dificultad, también se puede jugar a introducir abalorios en una cadena. Esto les ayudará a mejorar su coordinación ojo-mano.

 

Marionetas para los dedos
Es un juego sencillo que permite que se practique la movilidad de cada uno de los dedos de forma aislada. Además, podemos potenciar la expresión del lenguaje y la organización del discurso oral.
Pinchando en la imagen nos dirigiremos a una página donde se explica cómo hacer marionetas de dedos. De esta forma, se puede combinar esta actividad con la papiroflexia.

 

 

Construcciones
Los conocidos juegos de construcciones también pueden servir para trabajar la motricidad fina de forma lúdica. Además, este tipo de juego, de forma indirecta, ayudan a la adquisición de conceptos matemáticos básicos como la comparación de tamaños o las figuras geométricas.

Cubo de Rubik facilitado
Para resolver correctamente el cubo de Rubik se involucran numerosos procesos cognitivos y puede resultar una tarea muy costosa. Por ello, si lo que buscamos es enfocarnos en los beneficios a nivel motor que nos ofrece esta herramienta, podemos facilitar la tarea marcándonos como objetivo copiar de una plantilla una única cara.

 

Juegos con pinzas
Utilizando objetos cotidianos como pinzas también se puede potenciar la motricidad fina. Se abre un gran abanico con este material que se enfoca en la pinza digital y coordinación óculo-manual.
Algunos de los juegos que podemos proponer a los niños y niñas son:
– Poner tanto número de pinzas como señale el número de una tarjeta.
– Llevar con pinzas los pompones al color correspondiente de la caja.
– Añadir pinzas para crear figuras. Por ejemplo, que sean los rayos de un sol.
– Escribir letras en las pinzas y engancharlas en el dibujo que comience por esa letra.
– Utilizar pinzas de colores y ponerlas en los objetos que se encuentren por la casa con ese  mismo color.

 

Juegos de encaje
Son juegos muy intuitivos que se pueden realizar desde edades muy temprana. Les permite distinguir partiendo de la indagación y curiosidad las formas, colores y tamaños de las figuras. Se puede crear este juego con materiales reciclados, involucrando en ello a los niños y niñas, y potenciar también las habilidades motrices con tareas como recortar y pegar.