Un grupo de jóvenes con discapacidad han trasladado este fin de semana en el Evento Europeo de la Juventud las principales reivindicaciones del colectivo para conseguir un Erasmus más inclusivo. Se han reunido en Santander con otros 1.000 participantes para intercambiar opiniones y realizar propuestas con el fin de solucionar los principales problemas de la juventud.

Durante un debate que ellos han organizado han contado las principales dificultades con las que tienen que lidiar al solicitar el Erasmus: el trámite de la solicitud, la organización, los traslados, el alojamiento, etc.

De estos problemas nos habló Claudia Perucha Martínez, joven con un grado II de dependencia por una lesión medular, en una entrevista que realizamos en marzo de 2021. A los retos previos a los que se tiene enfrentar cualquier estudiante, se añaden ciertas cuestiones por el “gran vacío de responsabilidad” existente en la gestión del Erasmus para personas con discapacidad por la falta de costumbre. En su caso, por ejemplo, su carga aumentó al tramitar el tema del asistente personal: “Si yo tenía que buscar un sitio donde vivir, también se lo tenía que buscar a mi AP; si tenía que gestionar el dinero que podía gastarme durante mi estancia en Praga, también tenía que organizar el de ella, pagar los impuestos correspondientes… Es siempre el doble de trabajo. Además de que nadie te ayuda en nada porque nadie sabe realmente cómo hacer nada”.

Destacaba la inflexibilidad sistémica, la falta de recursos, la falta de ética institucional y la rigidez de los protocolos institucionales como principales trabas. Además, tuvo que realizar el procedimiento sin prácticamente ayudas, lo que le generó una gran incertidumbre y una gran inversión de tiempo y energía. No obstante, nunca se planteó renunciar al programa y pudo disfrutar de la experiencia Erasmus.

Según Claudia se deben dar “los recursos necesarios para que las personas en situaciones más desfavorecidas puedan optar a esta experiencia internacional que te impulsa tu futuro y te marca la vida para siempre” y reivindica que todas las personas puedan realizar el proyecto de movilidad en igualdad de condiciones. Estas mismas necesidades son las que han planteado el grupo de jóvenes con discapacidad en el Evento Europeo de la Juventud. Bajo el lema “Buliding Europe, breaking barriers”, se pretende proponer ideas y mejorar la organización de programa, con el fin de que nadie pueda quedarse atrás.