El deportista madrileño, Javier Martí­nez Fernández-Aceytuno, vecino de Las Rozas y de 26 años, se ha convertido en uno de los mejores deportistas de Boccia de España. Junto a otros cinco compañeros, Javier representa estos dí­as a España en el Campeonato del Mundo de Boccia, que se celebra en Pekí­n.

La boccia es un deporte clásico (ya se practicaba en la antigua Grecia), similar a la petanca, practicado por personas en silla de ruedas que tienen parálisis cerebral o discapacidad fí­sica severa. Se juega de forma individual, por parejas o equipos, sobre una pista rectangular en la que los jugadores tratan de lanzar sus bolas lo más cerca posible de la pelota blanca que sirve de objetivo, a la vez que intentan alejar las de sus rivales.

Javier se inició en la boccia en el año 2005, cuando se integra como deportista del Club Infanta Elena, entidad perteneciente a la Federación Madrileña de Deportes para Personas con Parálisis Cerebral. “Al mismo tiempo se implantaba este deporte en el Instituto Carmen Conde en las clases de Educación Fí­sica, gracias al empeño de Aurora Muro de integrar a los alumnos con necesidades especiales en sus clases”, comenta el joven deportista. Además, desde hace cuatro años, decidió intensificar las sesiones de entrenamiento, y entrena dos dí­as por semana en el Polideportivo de la Dehesa de Navalcarbón, gracias a la cesión de una sala por parte de la Concejalí­a de Deportes del Ayuntamiento de Las Rozas.